SUMARIO: Diez militantes de la rama soviética del Partido Radical fueron detenidos por fuerzas antidisturbios de la Policía tras manifestarse durante cerca de tres minutos frente a la Embajada española en Moscú para pedir libertad de Prensa en España, Italia y la URSS.

(A. Sotillo, "ABC", 21 de octubre de 1989).

Dos autobuses de transporte urbano repletos de miembros de las recién creadas fuerzas antidisturbios - los temidos boinas grises - junto a un considerable número de agentes de la KGB esperaron la llegada del pequeño grupo de radicales, que organizaron la primera manifestación de disidentes que tiene lugar junto a la representación diplomática española.

tras desplegar tres pancartas que junto a la efigie de Ghandi pedían "libertad de Prensa para Occidente y Oriente" en caracteres que imitaban los rascacielos neoyorkinos, uno de los manifestantes entregó una carta dirigida al embajador de España, en la que se afirma que "socialismo real" y "democracia real" convergen en la misma lógica de exclusión y de violencia, pues saben muy bien que el control de los medios de comunicación hace innecesario tener que recurrir a los antiguos métodos".

Nikolai Jramov, portavoz de los manifestantes, declaró a ABC, mientras contemplaba con aprehensión desde las escalerillas de la Embajada como eran detenidos todos sus compañeros, que "naturalmente los problemas en cuanto a libertad de expresión en Occidente y en Oriente son muy distintos".