Manifestación de apoyo a la vigente política en materia de drogas de las autoridades neerlandesas.
La política sobre las drogas ilegales desarrollada por el gobierno neerlandés no sólo es un ejemplo de tolerancia sino, ante todo, un ejemplo de buen gobierno que ha evitado a los ciudadanos quedar expuestos a la violencia ciega de la criminalidad o a la expansión incontrolada del virus del SIDA.
Esta política constituye la única tentativa seria - y de éxito - de reducir los daños provocados por las políticas que confían al hampa el monopolio de la producción y de la distribución de drogas. Un monopolio clandestino que no permite ningún control de las sustancias vendidas y hace más potente día a día la criminalidad en todo el mundo, cada vez en mejor situación para condicionar la economía, las finanzas, las fuerzas del orden, la justicia y los medios de comunicación de nuestros Estados. Percibimos pues con inquietud creciente en el reajuste de la política neerlandesa en materia de drogas el fin de un enfoque tolerante respecto a los consumidores de cannabis.
Como resultado de numerosas presiones extranjeras, de la inseguridad y la intolerancia crecientes, las lecciones de la política hasta hoy seguida han sido olvidadas. Las restricciones en la distribución del cannabis arrojan ya ahora mismo a los consumidores a la ilegalidad, poniendo en cuestión de nuevo su integración en la sociedad y favoreciendo su discriminación. La política de tolerancia parece así tener que doblegarse ante una política europea única... prohibicionista.
Porque vía la prohibición del cannabis es el mismo Estado de Derecho lo que se ve puesto en cuestión. En efecto, si cada individuo tiene el derecho de buscar su propio desarrollo según las formas que le parezcan más apropiadas con la única condición de que al obrar así no cause daños a terceros, el Estado no puede pretender impedir el consumo de sustancias cuando éstas no causan efectos sobre terceros.
Por estas razones, invitamos a las autoridades de los Países Bajos no sólo a abandonar toda idea de revisión de su política actual resapecto a las drogas, sino también a defender y promover con renovado énfasis este ejemplo de tolerancia neerlandesa y de tolerancia a secas.
Pedimos, pues, a las autoridades de los Países Bajos:
- Que prosigan resueltamente su política vigente en materia de drogas;
- Que tomen la iniciativa de proponer a los demás países miembros de la Unión Europea la presentación de instrumentos de denuncia de las actuales convenciones de las Naciones Unidas sobre las drogas, con el fin de alcanzar lo antes posible la convocatoria de una nueva Conferencia Internacional;
- Que promuevan la investigación sobre los usos terapéuticos, médicos y sociales del cannabis y sus derivados;
- Que garanticen en el seno de la Unión Europea los derechos e intereses de los consumidores de drogas.
Por estas razones nos manifestaremos el 19 de Mayo a las 11 en Amsterdam y en centenares de ciudades holandesas, ante las embajadas y consulaodos de los Países Bajos de numerosas capitales y grandes ciudades de Europa Occidental, Central, Oriental, y en Estados Unidos.
I.R.D.R.H.R. (Drugs Peace Institute)
Partido Radical (Transnacional y transpartido)
L.I.A. (Liga Internacional Antiprohibicionista)
E.C.C.O. (European Cannabis Consumers Organization)