EBOLA: EL PARTIDO RADICAL RECLAMA LA INMEDIATA CONSTITUCION DE UN COMITE DE CRISIS BAJO LA COORDINACION DE LA OMS Y LA DIRECTA RESPONSABILIDAD DEL SECRETARIO GENERAL DE LA ONU.

Bruselas-Madrid, 13 de Mayo 1995. Ahora el virus Ebola se suma a los otros que prosiguen, implacables, su mortífero camino.

El Partido Radical, no ahora, sino ya en el Consejo General de Sofia (julio de 1993), resaltó con énfasis el problema de las pandemias y de los virus emergentes como cuestiones "políticas" prioritarias, entendiendo que el VIH/SIDA representa más bien un caso emblemático que no el paroxismo de los desastres que podrían ser bautizados con los nombres de los virus letales ya conocidos como las variedades Ebola, Marburg, Junin, Lhassa, Machupo, Guaranito, Dengue, O'nyong-nyong...

El Partido Radical Transnacional ha desarrollado en estos años campañas sobre el SIDA y sobre las pandemias en general con la esperanza de que gobiernos y opiniones públicas se pusieran más en guardia frente a los virus emergentes; lo que no ha sucedido y hoy sigue sin pasar. Frente a la perspectiva de pandemias tremendas, lo que predomina es el enfoque fatalista: Como en el caso del SIDA, se espera, evidentemente, a que el virus Ebola dé un salto cualitativo y devenga en fenómeno mundial para adoptar alguna contramedida tan inane como tardía.

Desde el año 1993, el Partido Radical, transnacional y transpartítico, ha imaginado y promovido una propuesta para construir un marco jurídico coherente y transnacional a través de la la creación de un instrumento multilateral, como, por ejemplo, una convención de la ONU. Aunque, hoy como ayer, hemos de constatar que:

- No existen definiciones o clasificaciones oficiales para las contingencias epidémicas.

- Las respuestas a las situaciones de emergencia se formulan de manera asistemática.

- No hay procedimiento oficial para determinar cual o cuales organizaciones internacionales deben asumir la responsabilidad administrativa, técnica y financiera, por no hablar de la política.

- La inexistencia de una red de comunicaciones bien definida impide una respuesta eficaz de la pluralidad de instituciones internacionales.

La OMS - Organización Mundial de la Salud - no se halla en estado de afrontar las emergencias por sí misma, con su presupesto anual de 250 millones de dólares ni siquiera podría gestionar el hospital de una ciudad medianamente grande, inimaginable cubrir las necesidades de más de 160 países miembros y de miles de millones de personas. Mas a pesar de las legítimas reservas sobre la capacidad de la OMS, éste es el único órgano supranacional reconocido por la comunidad internacional en el sector sanitario.

El Partido Radical propone en consecuencia que el Programa Conjunto de la ONU sobre el SIDA (que agrupa a todas las agencias internacionales competentes: UNICEF, UNDP, UNESCO, UNFPA, OMS y Banco Mundial), se amplíe al conjunto de los virus emergentes y que en su seno se cree inmediatamente un comité unificado de crisis bajo la coordianción de la OMS y la responsabilidad personal del Secretario General Butros-Gali.