Bruselas, 29 may (EFE).- España no tiene previsto enviar refuerzos a Bosnia, tal como ha decidido Gran Bretaña, pese a la escalada bélica y la creciente vulnerabilidad de las tropas de la ONU, aseguró hoy, lunes, el ministro expañol de Exteriores, Javier Solana. "Por el momento no se ha decidido", dijo Solana sobre en envío de refuerzos o una ampliación de la presencia naval en el Adriático. "Nuestros soldados están en una zona, Mostar, donde por el momento hay paz", explicó el ministro español antes de reunirse con sus homólogos comunitarios en Bruselas para debatir la gravedad de la situación en la antigua Yugoslavia. Gran Bretaña ha anunciado el envío inmediato de dos baterías de artillería y un escuadrón blindado de ingenieros, apoyados por helicópteros, y ha puesto en alerta a varios miles de solados, para proteger a sus hombres en Bosnia. Solana vaticinó que no se van a tomar decisiones espectaculares de urgencia y aconsejó "cuidado y prudencia", sobre todo ante cualquier decisión que se pueda adoptar
que complique la seguridad de los más de 300 soldados y observadores de la ONU retenidos por los serbobosnios. "Es una operación complicada, cuanto más pensada esté y más prudentemente valorada mejor", dijo en cuanto a cualquier paso que se pueda adoptar en la encrucijada actual en que se encuentra la comunidad internacional frente al desafío serbio. El ministro confirmó que los dos observadores militares españoles rehenes de los serbios, uno desde el viernes y otro desde el sábado, "están bien" y "no corren riesgos". España participará, por primera vez, en su condición de miembro de la "trioka" comunitaria, esta noche en la reunión ministerial del Grupo de Contacto, prevista en la embajada francesa en La Haya, junto a los ministros de Exteriores de Francia, Alemania, EEUU, Rusia y Gran Bretaña. Para el Gobierno español, las próximas horas y días de intensas gestiones y contactos al más alto nivel entre las potencias, la UE, la OTAN y la ONU deben concentrarse las acciones en dos frentes: el diplomático y c
ambios en el mandato para los soldados de UNPROFOR en Bosnia, que defina mejor sus misiones y los medios con que cuentan para desarrollarlas. "Hay que dar un nuevo impulso diplomático" para que el presidente de Serbia, Slobodan Milosevic, reconozca Bosnia. "Estamos a un milímetro de ello", dijo Solana, quien consideró que tal paso sería sumamente significativo ya que "implicaría que la Gran Serbia es imposible". Gran Bretaña, a través de su ministro de Exteriores, Douglas Hurd, se ha expresado en los mismos términos de renovar las presiones sobre Milosevic, como única carta al alcance de la mano en estos momentos para influir sobre los serbios de Bosnia. Eventuales cambios en el despliegue de los soldados en Bosnia no se espera que afecten a las 1.400 tropas españolas, ya que no se encuentran en ninguno de los enclaves del Este, donde se pueden producir los principales cambios. Solana confirmó el apoyo español tanto para cambios en el despliegue como para una reagrupación de los cascos azules, en un intento
de evitar una retirada. El secretario general de la ONU, Butros Gali, tiene previsto anunciar entre hoy y mañana medias sobre el futuro de la fuerza de paz en Bosnia.