Madrid, 4 de febrero de 1992

La Unión Liberal Cubana denuncia que, por fuentes directas de Cuba, ha llegado al conocimiento de los abusos a los que está siendo sometida la escritora María Elena Cruz Varela en la cárcel del Combinado del Sur, en Matanzas, donde se encuentra recluida en una pequeña celda con tres mujeres delincuentes comunes.

Según todos los indicios, María Elena Cruz Verela, presidenta del grupo opositor Criterio Alternativo, puede estar siendo sometida a un proceso de intoxicación por medio de fármacos sicotrópicos con el objeto de intentar doblegar su voluntad para luego presentarla ante la opinión pública, como en su momento hicieron con otros intelectuales, sometidos a tratamientos siquiátricos semejantes.

Dentro de este contexto de las presiones sicológicas, se inscribe el acoso y las amenazas a su hija Mariela, de veinte años, y al pequeño Arnold, de once, que ha dejado de ir a la escuela por temor a ser víctima de más actos de repudio, dirigidos por los maestros de su centro escolar.

La Unión Liberal Cubana denuncia este hecho ante la opinión pública mundial y alerta a todas las organizaciones de Derechos Humanos para que exijan el fin de estas prácticas inhumanas, que están siendo aplicadas a los hombres y mujeres que sufren en este momento el presidio político cubano