(52 votos a favor, 1 en contra y 4 abstenciones)El Consejo Federal del Partido radical, reunido en Roma del 1 al 5 de septiembre, tras haber debatido la necesidad de crear y apoyar situaciones que hagan que sea irreversible el proceso de mutación que está lentamente iniciando en el Este europeo;
considerando la necesidad de afianzar una unidad europea que no sea la de los actuales Estados representados en el Parlamento de Estrasburgo, sino que incluya también a los países del Este que aun siendo parte integrante de la historia y de la cultura europea han sido separados por razones absolutamente independientes de la voluntad de esos pueblos y que responden sólamente a la lógica de poder, de control y de subyugación que ha caracterizado la política comunista de la URSS;
considerando que la situación actual es el resultado de los acuerdos estipulados por los EE.UU., URSS, Francia y Gran Bretaña, acuerdos que han determinado el tablero de ajedrez internacional y los bloques contrapuestos; considerando que la ejemplificación máxima de esta división está representada por el muro de Berlín, limítrofe con la República Democrática Alemana y simbólicamente frontera entre el Este y el Oeste; manifiesta la necesidad y la urgencia de organizar una vasta campaña internacional de opinión que, recogiendo en un sólo llamamiento decenas de millones de adhesiones de ciudadanos de todo el mundo, subraye la urgencia histórica e imponga la necesidad moral de superar los tratados de guerra que han determinado la política de los bloques y solicite no sólo como acto simbólico sino también como acto concreto que indique para Europa y el mundo el inicio de un nuevo curso, la demolición del muro de Berlín;
al respecto, el Consejo federal augura que el Partido radical participe activamente en una campaña que pueda conducir a la demolición del muro de Berlín antes de que se cumpla el treinta aniversario de su construcción, es decir antes del 13 de agosto de 1991.
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