Bruselas, 8 de mayo de 1991
Querido colega:
Un nuevo acontecimiento ha tenido lugar en el proceso de construcción de Europa: la Cámara de los Diputados italiana ha formalmente advertido a su gobierno que no está dispuesto a ratificar las conclusiones de las Conferencias intergubernamentales sobre la Unión política, económica y monetaria de Europa si no las aprueba a priori el Parlamento europeo. El Parlamento belga, por su parte, ha presentado una propuesta de resolución parecida.
Nosotros, los abajo firmantes, diputados electos en distintas listas en el Parlamento europeo junto con los inscritos al Partido radical, partido transnacional y transpartídico, os invitamos a adoptar una iniciativa análoga en la Asamblea en la que os halláis.
En efecto, el modelo delineado por los Ministros reunidos en las Conferencias Intergubernamentales en lo que se refiere a la política exterior y de seguridad se basa en la primacía que cobra la cooperación intergubernamental que deja prácticamente intacto el déficit democrático en la Comunidad europea, puesto que las decisiones seguirían adoptándose en secreto en las reuniones a nivel de gobiernos, por lo que el Parlamento europeo - de la misma manera que los Parlamentos nacionales - seguirían desempeñando un papel subordinado y básicamente de carácter consultivo, cuando no totalmente excluidos de todo poder decisional europeo.
Estas medidas, tal y como ha subrayado con razón el Intergrupo Federalista del Pr, harían que fuese de alguna manera definitiva la existencia de tres "Comunidades" separadas, cada una de ellas con sus competencias y con sus procedimientos especiales: una Comunidad "económica" para la realización del gran mercado interno, una Unión económica y monetaria, una Cooperación intergubernamental reforzada en materia de política exterior y de seguridad. Una evolución semejante supondría un paso atrás en el proceso de integración europea y sería incompatible con el proyecto de los Padres Fundadores de la Comunidad europea para crear una auténtica Unión Europea de tipo federal, sin por ello dar ninguna garantía de resolución de los grandes problemas de eficacia y de transparencia de las instituciones comunitarias y sin seguir estando a la altura de las responsabilidades cada vez mayores de la comunidad europea en el panorama internacional.
Nosotros, los abajo firmantes, convencidos de que sólo la Unión federal de Europa basada en las instituciones democráticas, puede afrontar los desafíos de nuestra época, nos dirigimos a usted, querido(a) colega, para informarle de la iniciativa del Parlamento italiano y de la del Parlamento belga, bajo forma de propuesta, y para que las demás iniciativas sigan por el mismo camino y puedan nacer en defensa del papel de nuestros respectivos parlamentos, del Parlamento europeo y de su función de "garantizador" de la legitimidad democrática de los nuevos tratados y del carácter democrático de las nuevas instituciones de Europa.
En calidad de miembros del partido radical, cuyos diputados electos en Italia han elaborado el texto votado en la Cámara, preocupados por hacer que la mayor información posible sobre estos temas vitales circule entre nosotros y pueda determinar que numerosos colegas por encima de las fronteras nacionales o las divisiones de partido, trabajen juntos en pos de este objetivo unificador, le transmitimos dichos textos así como un extracto de la última resolución del Parlamento europeo a este respecto, para que usted pueda juzgar conveniente o no que un intento de dicha envergadura se emprenda en su Asamblea y, si procede, favorecer una iniciativa en este sentido.
Con la esperanza de haberle informado, y confiando que usted considere los textos adjuntos, aprovechamos la ocasión para saludarle atentamente.
Adelaide AGLIETTA, MPE
Virginio BETTINI, MPE
Marco PANNELLA, MPE
Marco TARADASH, MPE
P.D.: Quedamos a su entera disposición para toda información tanto en lo que se refiere a esta iniciativa como a la actividad del Partido radical, en nuestra dirección en Bruselas.
