Señor Presidente, en Cataluña hemos vuelto a sufrir una gran catástrofe, no únicamente natural, sino que ha costado 11 vidas humanas, debido a unas inundaciones de las que, en algunos sitios, no había memoria histórica de la virulencia de las mismas. Hace unas semanas tuve que intervenir en este Pleno para pedir una ayuda especial por parte de las instituciones europeas por los incendios que hemos padecido, y a ello se suma ahora la catástrofe de las inundaciones. El Consejo y la Comisión deben mostrar su solidaridad con las zonas damnificadas.