Entrevista con el líder radicalSUMARIO: No violencia, desarme unilateral, antimilitarismo: la reflexión teórica para concebir una alternativa de defensa que contemple la posibilidad de supervivencia de un país desarmado a nivel militar pero armado de estructuras, estrategias y tácticas de defensa popular no violenta. La vergüenza de la neutralidad. El uso de la violencia interna o externa es índice de la impotencia de usar otras armas.
(ITALIA OGGI, marzo de 1978)
"Usted predica la no violencia, lo cual como argumento filosófico es sin lugar a dudas válido y deseable. Sin embargo, nos parece que anda usted un poco débil con respecto a la realidad cotidiana. La historia nos presenta algunos casos de hombres que han logrado detener, desarmados, un ejército. Cuáles son, según su opinión, las posibilidades de defensa y de supervivencia de un país desarmado, como querría usted que fuese el nuestro, en caso de que acabase encontrándose en un roce internacional degenerable?
En primer lugar, espero que nuestro país no sea el único en llevar a cabo ese plan decenal de reconversión de las estructuras y de los gastos militares, en civiles y sociales, que otros llaman más someramente "desarme unilateral". Como se sabe, he estado en España para defender un movimiento que está librando nuestra misma batalla. Pero el problema de una defensa popular y no violenta, como estrategia alternativa a la grotesca e inexistente "defensa militar" de los Estados nacionales menores, está hallando en la actualidad, en Europa y no sólo aquí, estudios y elaboraciones de gran prestigio; y no solo ésas, por ejemplo las del prestigioso general francés Paris de la Bollardière (1), sino de subgrupos de estudio "multinacionales militares", llamémoslas así. Por lo tanto no se trata de repetir la historia o el mito de alguien que esgrimiendo la cruz (hoy: los emblemas radicales y socialistas) paralice y desarme a los bárbaros en la frontera, sino el de una reflexión teórica, de una alternativa de defensa y de
una lucha política que recorra caminos adecuados para salvar los territorios y a las personas que viven en ellos, en una palabra: la defensa de la vida. En definitiva, las posibilidades de supervivencia de un país desarmado a nivel militar pero armado de estructuras, estrategia y tácticas de defensa popular no violenta, son de todas maneras mayores desde ahora que las de los países que actualmente cuentan con armamentos y ejércitos marginales y subalternos, exentos de disuasiones reales para aniquilar al adversario que es objetivo táctico útil o necesario en enfrentamientos internacionales entre las máximas potencias entre las que, no es casualidad, en estos momentos se configuran sólo hipótesis de conflictos indirectos, es decir de masacre táctico de las partes periféricas del "imperio".
Qué opina de la seriedad del aparato militar de aquellos países que defienden una postura histórica de neutralidad, como Suiza y Suecia por ejemplo?"
Es necesario acabar de una vez por todas con una vergüenza que siempre sale a relucir. Lo que salvaguardó a Suiza en los años de las dos guerras mundiales no fue, desde luego, su potencial militar, ridículo en comparación con el de la línea Maginot (a la que se le dio la vuelta y enterró en menos de una semana), sino intereses convergentes del grandísimo capital financiero e industrial tanto alemán como demócrata occidental, por no sacar a colación otras razones bien conocidas. En cualquier caso, el armamento actual tanto sueco como suizo sirve sobre todo para el capital financiero, para la industria nacional e internacional, la degenerada economía de las inversiones tecnológicas de nuestra época que asisten a una ciencia aplicada arrastrada por el complejo militar industrial mundial. La disuasión de los dos armamentos serviría únicamente contra los países menores o vecinos, es decir, en ambos casos, para países que no poseen su propia autonomía estratégico militar y para más inri amigos.
"A nivel individual, lo de ofrecer la otra mejilla al agresor es una opción calculada y libre. Pero qué derecho tiene un gobierno, al aplicar una política semejante, de jugarse libertad e independencia de sus ciudadanos?
A nivel inmediato, la respuesta no violenta se presenta siempre como "evangélica" o con perspectivas de perder. Incluso en las relaciones interpersonales en crisis, el padre que abofetea al hijo, o el amante al amado, en ese momento parece vencer, a la larga acaba perdiendo tanto el hijo como el amado o una relación positiva con ellos. Lo mismo pasa en política nacional o internacional, en donde la utilización de la violencia interna o externa es señal de la impotencia para utilizar otras armas. Sería interesante detenernos más en este argumento: hace veinte años que los radicales asisten en Italia a una crisis y que acaba desapareciendo, oleadas de "izquierda violenta", que los adversarios cada vez consideran más peligrosa. Cada dos años, además, cabe constata que ellos desaparecen mientras que nosotros crecemos en la conciencia de todos. Por otra parte los militares saben que en España, en Rusia, Napoleón fue vencido no tanto por la fuerza de los ejércitos, sino por la sucesiva de los Estados y poblacione
s que supieron utilizar el factor de la naturaleza y el del tiempo contra el genio y la potencia del emperador....
Marzo de 1978
(1) Famoso general francés que en los años 60 presentó su dimisión para protestar contra la política de defensa del gobierno francés.
N.d.T.
(1) BOLLARDIERE . Famoso general francés que en los años 60 presentó su dimisión para protestar contra la política de defensa del gobierno francés.