SUMARIO: En el mes de diciembre de 1980, el grupo terrorista italiano "Brigadas Rojas" secuestró al magistrado Giovanni D'Urso reivindicando el cierre de la cárcel especial de Asinara. Se creó en la clase política, apoyado por los periódicos más importantes, el "partido de la rigidez" que no aceptaba ningún tipo de diálogo con los terroristas. Era necesario que se produjese el asesinato del juez D'Urso para dar el "golpe" autoritario. Los periódicos decidieron boicotear todos los comunicados de las Brigadas Rojas. Sólo el Partido radical mantuvo a través de su radio y su televisión el hilo de diálogo con los "compañeros asesinos". El 14 de Enero de 1981, Leonardo Sciascia se dirigió a las Brigadas Rojas con un llamamiento público que reproducimos a continuación.

El 15 de enero las BR dejaron en libertad a Giovanni D'Urso.

("Número único" para el XXXV Congreso del Partido radical - Budapest 22-26 abril 1989)

Es la primera vez que me dirijo directamente a las Brigadas Rojas. No a los hombres de las Brigadas Rojas sino a esta monstruosa abstracción que se denomina así. Y no me dirijo a ella en nombre de los valores que desde hace años pisotean ni en nombre de sus futuros arrepentimientos. Me dirijo a ellos planteando este simple problema y dejando que entrevean - en beneficio suyo momentáneo - la solución. Habéis negado con desprecio ser un instrumento ciego de atenta maniobra ajena. Pero matando al juez D'Urso la duda, por lo menos la duda, no os asalta la duda?. Mirad a vuestro alrededor, miraos entre vosotros, reflexionad si sois capaces. Vuestra causa, la causa por la que lucháis, ya hace tiempo que está perdida. Sería una burla trágica que un mañana os diéseis cuenta de haber actuado por intereses por los que seréis los primeros en ser envilecidos.