SUMARIO: Silverio Corvisieri atribuye a los radicales una postura indiferente con respecto al referéndum propuesto contra la ley 194 sobre el aborto por el Movimiento por la Vida. Pannella rectifica afirmando que existe una equivalencia esencial entre referéndum clerical y ley 194, pues ambos obligan de hecho a cientos de miles de mujeres a abortar clandestinamente. La única salida es la del referéndum radical que tiende a modificar la ley mejorándola.

(PAESE SERA, 21 de febrero de 1981)

Señor director, según el artículo 8 de la ley sobre la prensa, le invito a publicar la siguiente rectificación.

El artículo del 19 de marzo, publicado por "Paese Sera" con el título de "Los dos enemigos de Alessandrini" firmado por Silverio Corvisieri, contiene afirmaciones contrarias a la verdad y en cualquier caso gravemente dañinas para mi honor y mi identidad política y personal.

En el artículo, Corvisieri al afirmar que "la simple convergencia de intereses puede emparentar a fuerzas políticas distintas, conducirlas a hacer un juego de equipo o en cualquier caso utilizar, cada una en su campo, las operaciones que llevan a cabo" pone por ejemplo («mira por donde!) a mi persona. De hecho, escribe: "Un ejemplo notable en estos días: Pannella, el famoso Matacuras, en una lógica aberrante, la del "cuanto peor, mejor", ha llegado a declarar que le es indiferente el referéndum del llamado "movimiento por la vida" es decir la iniciativa clerical que tiende a hacer que caiga en la total clandestinidad la práctica del aborto".

La realidad es muy distinta. Yo he sostenido y sostengo:

a) que es necesario que toda la izquierda se una para luchar contra el referéndum radical;

b) que no hay ninguna diferencia básica entre la petición clerical y la 194. Ambas obligarían a cientos de miles de mujeres a practicar clandestinamente el aborto;

c) que la única salida es la del referéndum radical que tiende a mejorar la ley, aboliendo algunos artículos, y a acabar realmente con el aborto clandestino.

("Los lectores podrán juzgar con la "rectificación" si el pensamiento del diputado Pannella ha sido distorsionado o no. A nosotros nos parece que él lo que hace es invertir el orden de los factores, pero el resultado no cambia. Es cierto que en su silogismo, la afirmación de la indiferencia sustancial entre la 194 y la eventual aprobación del referéndum "clerical" se plantea como "premisa menor" para llegar a la conclusión de que la única salida posible para la izquierda es votar "sí" al referéndum radical. Pero al ser una premisa totalmente gratuita y no compartida por amplia parte de la izquierda, pasa a ser la indicación operativa del diputado Pannella. Así es como lo ha interpretado mucha gente. Si ello ofende al líder radical (tal y como se desprende de la invocación al artículo 8 de la Ley sobre la prensa), tomamos nota de ello. Señal de que declarar indiferencia ante el referéndum "clerical" sería una infamia. Pero, si así es, por qué no lo dice más claramente?")