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Pannella Marco - 15 dicembre 1981
Reflexiones y anotaciones
Marco Pannella

SUMARIO: Marco Pannella, al cabo de veinte años vuelve a ser Secretario del Partido radical siguiendo una iniciativa política contra el exterminio causado por el hambre en el mundo que desde hace dos años se ha ido delineando. En particular, el 24 de junio de 1981, paralelamente en distintas capitales del mundo occidental (desde Nueva York hasta Ginebra, desde París hasta Roma) se presentó un "Manifiesto-Llamamiento", firmado por 52 Premios Nobel, con dos puntos fundamentales: la intervención para garantizar la supervivencia de las poblaciones amenazadas por el hambre es la prioridad de nuestra época; a partir de esta prioridad debe organizarse una voluntad política específica, a nivel de las instituciones y de los partidos. El 2 de septiembre de 1981, Marco Pannella inicia una huelga de hambre a partir de los objetivos indicados por los Premios Nobel, y en particular para que se apruebe inmediatamente, en el mayor número de parlamentos posible, y en particular en el italiano, así como por la Asamblea europe

a de Estrasburgo, un plan de intervenciones extraordinarias y urgentes para garantizar la supervivencia de por lo menos tres millones de personas en los 12 meses siguientes. En este contexto nace el Partido radical de 1982, con el objetivo concreto de salvar por lo menos a tres millones de personas a partir de 1982. En este artículo aparecen las primeras reflexiones de Marco Pannella desde su cargo de Secretario del Partido radical: primordial por encima de cualquier otra iniciativa es la constitución, la existencia y el crecimiento del Partido, sin el que toda lucha estará destinada al fracaso. La redacción de dos propuestas de ley, la constitución de grupos y comités locales para su difusión no solo en Italia son objetivos claros. La necesidad de actuar para que el ala que se creó tras el lanzamiento del Manifiesto-llamamiento de los Premios Nobel, se consolide y se amplíe. La unidad de base de radicales, católicos, comunistas y laicos es indispensable. La organización de la Marcha de Navidad para la vida

y la paz, un objetivo.

Pannella analiza las primeras semanas de trabajo en el Pr, las iniciativas para la liberación de Gino Del Gatto (radical, médico, antiprohibicionista en materia de droga, procesado en Pescara acusado de haber suministrado morfina a pacientes toxicómanos) y de Athos de Luca (arrestado mientras se manifestaba ante la "Scuola di Guerra" de Civitavecchia, con el objeto de cambiar el nombre en "Scuola di Pace"), el mitin en la Bourse du Travail de París, las inscripciones de franceses al Partido radical. Las estructuras de trabajo en el parlamento europeo, el envío de cartas a tres mil obispos, y a dieciséis mil parlamentarios del mundo. Las actividades desde el punto de vista funcional y de la gestión política del Partido. La "cuota diaria" para inscribirse al Partido radical. Una dificultad que puede parecer "técnica" y sin embargo es moral. de comprensión y de planteamiento: la disponibilidad "de caja" necesaria para efectuar el depósito de la cuota íntegra inmediatamente. La humildad, la fuerza, el valor de "

solicitar" un préstamo. El primer compromiso del Secretario del Partido: solicitar la inscripción inmediatamente a los riquísimos compañeros radicales, en paro, jubilados, amas de casa o trabajadores con familia a sus espaldas. Los objetivos de la huelga de hambre, el ayuno político no es puro gesto, sino una forma distinta más enérgica y grave de vivir la lucha política y la confrontación con la violencia.

(NOTICIAS RADICALES) nº 42, 15 de diciembre de 1981).

"Amigos lectores, compañeras y compañeros.

lo que sigue no eran más que apuntes, material para un artículo.

la urgencia de que os llegue este periódico no me permite utilizarlo en el sentido previsto. Angiolo Bandinelli, que ha coordinado y garantizado la salida de este número de NR, ha decidido publicarlo, tal cual. Os ruego por favor que os lo leáis - si lo consideráis útil y necesario - sólo como documentación de las reflexiones que fueron fraguándose una cierta noche, a una cierta hora hace unos diez días por lo menos.

Hoy hubiese escrito otra cosa, escribir comporta escoger. Ahora tenemos mucho más claro lo que queremos intentar hacer, a lo largo de las próximas semanas, en las próximas horas. Sigue siendo válida, y primordial para nosotros, toda iniciativa la constitución, la existencia y el crecimiento del Partido Radical de 1982, es decir la campaña de inscripción y asociación al Partido. Sin el partido, toda lucha no será más que la de un puñado de amigos y compañeros, no de un Partido, y por lo tanto se perderá. La lucha pacífica actual, para el 1982, es la de salvar de la muerte, que se cierne soberana en nuestra época y en nuestro fuero interno sobre un pueblo inocente a punto de ser ajusticiado por una cultura nazi que inconscientemente anima e impulsa al poder actual, a los Spadolini, los Lagorio, los Andreotti, los Colombo, a inmolarlos en el altar del beneficio salvaje de los productores y mercaderes de armas.

Intentaremos lo más pronto posible, volviendo - confío - a ser plenamente capaces de trabajar día y noche puesto que es necesario elaborar de nuevo los textos definitivos de las dos propuestas de ley de iniciativa popular (una más claramente "radical", la otra más "unitaria), de las Peticiones (al Presidente de la República, a la Cámara de los Diputados, al Senado, al Parlamento Europeo), y de organizar su publicación y difusión en los Grupos y comités locales en las Secretarías municipales, en las Cancillerías de las Jefaturas, de los Tribunales y de los Tribunales de segunda instancia. Garantizaremos así mismo la "conversión" de estas iniciativas de manera que puedan ser adoptadas de forma simultánea y convergente, en Luxemburgo, Holanda, tal vez España, Alemania, Suiza y Austria. A todos los niveles de responsabilidad y de iniciativa, desde el institucional del PR hasta el personal de cada cual y en todas partes, en el Parlamento europeo, en la presentación de la moción a la Cámara de los Diputados, se

ha formado a partir del impuso del Manifiesto-llamamiento de los premios Nobel se consolide y se amplíe. Sobre todo, creo que la unidad del movimiento radical y del católico debe realizarse a partir de la realidad institucional encarnada por los comunistas, los sindicatos, y si es posible los "laicos": liberales, republicanos, socialdemócratas y socialistas.

En cuanto lleguen los textos os pedimos que recojáis las firmas y las adhesiones de los alcaldes, párrocos, consejeros municipales, intelectuales, y que las comuniquéis inmediatamente porque intentaremos añadirlas a las publicaciones que vayamos enviando. Tenemos previsto enviar uno con los "primeros" signatarios. El tiempo apremia, si no queremos volver a empezar desde cero, consumir la carga de atención, de crecimiento y de esperanza que hemos conquistado. Los radicales, diputados y todos los diputados que han escogido o que escojan ser finalmente legisladores en el sentido de la vida, de la paz, y de un nuevo orden internacional y nacional, deben contar con nuevas posibilidades inmediatas de intervención y de lucha: las propuestas de ley de iniciativa popular y las Peticiones a las Cámaras deben llegar a los destinatarios antes de que reanuden los trabajos, mienta se discute la ley financiera y el presupuesto del Estado. De la misma manera que, recíprocamente, debe llegarnos, nos está llegando ya la infor

mación necesaria para poder dar a conocer la realidad aberrante y la política ciega e irresponsable que se sigue oponiendo como algo "razonable" a lo "razonable de la lucha en pos de la paz y de la vida. Tenemos la intención de convocar una primera asamblea operativa, tal vez para la primera recogida y compulsación oficial y pública de firmas en Milán, domingo 20 de diciembre a las 15,30 horas con una asamblea nacional de militantes y de comités que durará hasta el martes 22 a las 13,30 horas. Justo a tiempo, para muchos, para trasladarse a Roma y echar una mano para organizar la gran Marcha de Navidad en pro de la Vida y la Paz que se celebrará el próximo 23 de diciembre.

Antes que nada, amigo o amiga que nos lees, compañeras y compañeros, es necesario - inmediatamente - inscribirse. Con los medios y la manera más adecuados, necesarios y rápidos.

Os deseo un buen trabajo a todos, con esperanza y amistad".

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Roma 27 de noviembre

He reflexionado largo y tendido y mientras me dispongo a escribir este primer artículo en calidad de Secretario del Partido aún sigo cavilando. Doy por descontado que quien lee está informado. En el momento de mi elección, el Congreso sabía que estaba llevando a cabo una huelga de hambre indefinida, vinculada a la salvación de por lo menos tres millones de los que están a punto de ser exterminados por el hambre en 1982. Disponíamos juntos de un puñado de cuatro o cinco semanas, como mucho, de mi presencia. Les he advertido inmediatamente a los compañeros más cercanos a mí en lo que a responsabilidad se refiere - el Tesorero Marcello Crivellini, los vice secretarios Francesco Rutelli, Giovanni Negri y Maria Teresa Di Lascia - y al Consejo Federal posteriormente, que la única manera de responder a nuestras tareas, deberes, internos y externos, era ponernos manos a la obra y actuar "como si" mi mandato fuese garantizado para todo el plazo estatutario, es decir: un año.

Empezar a trabajar, intensamente, para reanudar la actividad del Partido, la instalación de un proyecto de actividad, de aplicación de las decisiones estatutarias y de la decisión, implícita pero taxativa, que es el respeto pleno de la "regla" y de las directrices estatutarios. Paralelamente, cada día, luchar en pro del pleno logro del objetivo de salvar en un año, a partir de 1982, por lo menos a tres millones de personas, haciendo lo que sea necesario en las instituciones, en los partidos, a nivel internacional y de las distintas naciones en las que llevamos a cabo esta lucha.

Ya ha pasado casi un mes.

He interrumpido de nuevo la huelga de hambre, el 25 de noviembre. Más adelante analizaré este punto. En primer lugar quisiera recordar rápidamente y a grandes rasgos lo que hemos hecho. Con el tesorero y los vice secretarios y los compañeros que han permanecido de la anterior Junta de Secretaría (confirmada hasta enero) hemos profundizado sobre el estado del Partido, con respecto a las decisiones del Congreso, y hemos intentado empezar a trazar los rasgos de un proyecto para el Partido de 1982, a parte de asegurar mientras tanto la iniciativa cotidiana. Nos hemos reunido en Pescara, del 8 al 9 de noviembre, para poder de esta manera intervenir lo más rápidamente para liberar a Gino Del Gatto, arrestado a su regreso del Congreso de Florencia, y apoyar la lucha: se ha hecho lo que se ha podido. Así mismo hemos podido garantizar un mínimo de compromiso para que el poder no pueda seguir soportando que Athos de Luca siga en la cárcel. He celebrado mi segundo mitin en calidad de Secretario, tras el de Pescara, en

la "Bourse du Travail" de París, ante a más de mil personas, en una atmósfera absolutamente extraordinaria, y que concluyó con unas diez inscripciones al P.r, lo cual demuestra que también en Francia, la lucha contra el exterminio y objetivo radical de los 3 millones de seres vivos sean aprovechados como razón de elección organizativa y partídica.

Mientras tanto, en Bruselas y desde Bruselas, y desde Luxemburgo, en donde existen las dos estructuras de actividad parlamentaria y política europea que hemos realizado, Emma Bonino y Jean Fabre, Gianfranco dell'Alba y Maria Linosa, Alberto Fumagalli, Giampiero D'Amico y Rolando Parachini, han garantizado el envío a más de tres mil obispos y autoridades religiosas y espirituales de todo el mundo, y a los siete mil parlamentarios de 16 países europeos, una información sobre el estado de nuestra lucha, sobre los objetivos y los plazos de tiempo, sobre las iniciativas en curso en el Parlamento europeo y en los distintos Parlamentos nacionales, empezando por el italiano.

Ha sido un trabajo enorme, literalmente agotador: más de diez mil cartas, en seis lenguas distintas, lo más personalizadas posible, un trabajo militante, de "mesas en las calles" para la recogida de firmas.

Paralelamente, con el mismo grupo de compañeros, hemos garantizado una presencia intensa en el trabajo del Parlamento europeo, en donde hemos presentado decenas de enmiendas al presupuesto, hemos participado en gran número de reuniones de aula y de Comisión, y posteriormente hemos concebido y llevado a cabo, en Estrasburgo, el nuevo "Llamamiento" de Parlamentarios y ortos 90 diputados, muchos de los cuales no se habían sumado a la resolución aprobada el 29 de septiembre y que se ha convertido, con el Manifiesto de los Nobel, en el texto base de la lucha contra el exterminio. Añadid unas mil por lo menos cartas recibidas en por lo menos 4 lenguas, la coordinación, desde Bruselas, Luxemburgo y Estrasburgo, de las acciones en los demás países, la presión en los medios de comunicación franceses, belgas, holandeses, alemanes y británicos, los contactos con las Agencias del sistema de las Naciones Unidas, con algunas de las cuales, como el PNUD, particularmente intensos.

Considerad en estos días encuentros como los que hemos tenido con los diez Ministros de Asuntos Exteriores en los que ha participado con dureza, en cuanto Presidente del grupo del P.R., la presencia de Emma Bonino y Jean Fabre en Londres durante el Consejo europeo, en el intento imposible, pero obligatorio, de estimular de alguna manera una decisión sobre la resolución del P.E. o - por lo menos - de un comportamiento no fraudulento de la delegación italiana guiada por Spadolini y Colombo, y se podrá uno hacer una idea sobre lo que supone para los compañeros que están trabajando en el frente "europeo" y - gracias a ellos, de lo contrario no hubiese podido hacer nada de lo que he hecho - incluso para mí, del compromiso y de colaboración con la política del partido y de la lucha contra el exterminio causado por el hambre: cansancio y a veces sentido de la disparidad entre objetivo y fuerzas disponibles. Y no he enumerado más que una parte, importante desde luego, de lo que hemos hecho...

Mientras tanto, en Roma, según disposiciones provisionales de actividades que hemos realizado, Francisco Rutelli garantizó que el Partido iba a reanudar su actividad desde un punto de vista funcional y en lo que se refiere a la gestión política, y que se iba a ocupar especialmente del tan delicado sector de las iniciativas "por la paz". Giovanni Negri (que, tal y como hizo para la recogida de firmas necesarias para la celebración de los referéndums y para el periodo de la votación, el 10 de septiembre asumió la coordinación y la animación de la batalla para salvar a tres millones de seres vivos en 1982) con Gianni Sandrucci y otros diez compañeros garantizó el lanzamiento y el desarrollo de la campaña de inscripciones para el Partido de 1982; Gaetano Quagliariello y Maria Teresa di Lascia se ocupan en particular, en colaboración con el Presidente del Consejo Federal, Franco Corleone, del contacto entre las distintas realidades asociativas del partido, y del apoyo organizado y militante a las iniciativas del

Grupo parlamentario para imponer en la Cámara el debate urgente, no sobre declaraciones genéricas del Gobierno, sino sobre la moción discutida el 1 y el 2 de diciembre.

En el Partido, y en otras sedes, en particular Bari y Nápoles, en la Radico Radical, los Grupos, Noticias Radicales, en resumidas cuentas, todo se puso en movimiento rápidamente, sin perder ni un minuto. Muchos trabajaron día y noche. A ello ha correspondido el lanzamiento y la profunda seriedad de los cientos de personas - ochocientas en diez días - que han anunciado que se van a inscribir al Partido o a renovar el carnet - garantizando desde ese momento al Partido un valor de contribuciones el triple de lo que se recaudó el pasado año.

Cabe destacar el compromiso del Tesorero, Marcello Crivellini, que se va a encargar de la administración de una situación financiera - tal y como sabemos - catastrófica, por lo menos en lo que a la caja se refiere, y va a garantizar una participación constante en todas las reuniones y actividades del Partido, en la Radio, sin por ello dejar de brindar su colaboración al Grupo - que se lo ha pedido reiteradamente, lo cual es comprensible considerando este momento de debate y enfrentamiento con respecto a los balances.

Además, el partido ha podido contar con la colaboración militante de muchos compañeros parlamentarios, recuerdo en particular la jornada de protesta por las manifestaciones "pacifistas" convocadas bajo el signo de la política de Lagorio por los compañeros del PSI, las retransmisiones radiofónicas contestando a las preguntas de los oyentes para la campaña de inscripciones ....

Así resumo a grandes rasgos, más que un balance, cambio de horizonte de los 25 días transcurridos entre finales del Congreso y el momento en el que escribo, algunas consideraciones sobre el futuro inmediato. Tras el rechazo de la Comisión y del Consejo de la Comunidad de aplicar en los tiempos y de la forma solicitada por la Resolución del Parlamento europeo, tras el resultado de la batalla en la Cámara y en Italia, hoy más que nunca tenemos que hacernos fuertes, insistir con tenacidad, organizarnos, organizar toda fuerza y potencialidad, apoyar a los Grupos parlamentarios en la batalla parlamentaria sobre el presupuesto y el Plan trienal, en el que el Partido deberá aplicarse, y deberá estar lo más informado posible (he aquí por ahora, la función extremadamente difícil pero de curiosa eficacia y fuerza de Radio Radical) para movilizar a un movimiento de apoyo desde la base, desde el país, desde la cultura, con objetivos claros, concretos e inmediatos. Tenemos que aclarar que el Secretario y el Tesorero, la

Junta de Secretaría y - salvo Giovanni Negri - los vice secretarios no podrán dejar de apoyar el trabajo principal de conexión e información, de movilización, de lo cual se encargará casi exclusivamente la Radio.

Es urgente concebir, preparar, poner en marcha la disposición y el proyecto de aplicación de los objetivos estatutarios, del Preámbulo, del Manifiesto de los Nobel, de la Resolución del Parlamento europeo, de las deliberaciones congresales, acelerando lo más pronto posible la puesta en marcha del proceso constitutivo y de lucha del Partido Radical de 1982; puesto que tenemos que tener en cuenta que contamos con plazos de tiempo absolutamente dramáticos, tanto a nivel externo como interno. Por ello no excluyo que nos veremos obligados anticipar cuatro días antes de finales de año la reunión del Consejo Federal, en la que presentaremos el "Estado del Partido" y el proyecto de disposición y de política para el nuevo año, el año en el que - a partir del 1 de enero - empezarán a ser asesinadas las personas a las que tenemos el compromiso de salvar para que vivan, en un clima de paz, para salvarlas del exterminio, del genocidio. De hecho, tengo intención de participar en el seminario de los Grupos parlamentarios,

convocado para primeros de enero.

Pero, para que todo esto sea algo concreto, para que cobre forma y crezca, para que garantice esperanza y reconforte a cada uno de nosotros (y los que sienten amistad por nosotros, pero al mismo tiempo con gran escepticismo ante la enormidad de las dificultades) es necesario, cada día, día tras día, puntualmente, con decisión, dedicarnos otorgando prioridad a la campaña de nuevas inscripciones para el Partido de 1982. Lo digo sobre todo para recordarlo mejor y anclarme a esta opción necesaria, yo el primero. Ello significa ser cada día mejor, y más, yo mismo, "nuevo" inscrito, a parte de actuar para que haya "otros" y los "nuevos" compañeros inscritos, porque este nuevo año sea también "nuevo" y "distinto".

Si, así pues, se espera que en calidad de Secretario del Partido indique como actuar, dé un consejo, le pido a todo el mundo, al Partido federal en Italia, pero también en Francia, en España, en Bélgica, en donde existen asociaciones y actúan, para que cada día organizándose, a nivel personal si no es posible organizarse de otra manera, o tal vez con asociaciones ( por qué no?) constituidas para tal fin, para promover inmediatamente inscripciones, pagando anualmente la "cuota cotidiana" que debe constituir la medida de nuestra voluntad y de nuestra capacidad de cambiar y crecer nosotros mismos - inmediatamente, ahora - para que cambie y crezca el Partido, con la dimensión que decimos que creemos y que queremos, para este año, para nosotros y ... por nosotros.

Es una orientación o una petición firme de compromiso auténtico, y realmente diario, de apoyo y de premisa a cualquier otro, para todos y para toda estructura o sujeto radical; porque el trabajo específico de cada cual no constituya (tal y como sucedería si la lógica de las cosas no estuviese gobernada y canalizada según la lógica de nuestra necesidades y de nuestras elecciones) distracción de la necesidad prioritaria, de la moralidad prejuicio del "ser" "juntos" "Partido". Quisiera repetir aquí mi convicción de que actualmente es más factible - más difícil sólo aparentemente, si se tiene en cuenta el resultado - el intento de convencernos para unirnos, para echarnos una mano para lograr los objetivos que son nuestros, precisamente para que podamos pedir algo que sea importante (que importe) al día, es decir en la continuidad de la vida, a parte del año de cada cual. Planteemos lógicamente, este año, para constituir el nuevo partido de 1982, un problema y también una cuestión moral (con respecto a la morali

dad de cada cual, que quede claro) por resolver: una decisión que no puede no desembarazarnos, de golpe, del reflejo "ideológico" en el peor sentido de la palabra, pretexto, pero casi insuperable por el nivel formalista y superficial, del "yo no me he afiliado nunca, ni pienso hacerlo nunca, etc.." Porque en estos casos es auténtica en efecto, como premisa a una idea abstracta del "afiliarse", insulsa, como si realmente la cuestión de inscribirse con mil liras o con cincuenta mil liras a un partido además de estarlo ya a otro, por un pacto anual motivado sobre todo por la campaña contra el holocausto - para que se logre - o para "sumarse" a la "política" "socialista", "comunista", "democristiana"; o liberal, republicana, del MSI. Como si no se aceptase ser casi automáticamente "afiliados" al "Sindicato", aceptando dar sumas relativamente ingentes para objetivos y una política que casi nadie siente como relevante y necesaria, o que en cualquier caso sea capaz moral e idealmente de implicarlo y de cambiar - es

e año - su existencia misma.

Y si un día no habrá inscripciones de otros, no faltará la posibilidad de mejorar, de dar cuerpo a una vida mejor, a un mejor valor del carnet. Cada uno de nosotros, yo el primero, tendríamos que acordarnos siempre de que en el diálogo lo que es más convincente es el ejemplo, demuestra que lo que se pide ya ha sido hecho, se está haciendo, y se seguirá haciéndolo si el otro decide por su cuenta, finalmente, empezar él también. Que se organice el Partido federal, en su sede central, y en otros lugares, todo sujeto radical, todo lector de esta hoja. Se lo pido en primer lugar a aquellos que me preguntan, que nos preguntan, que se preguntan qué es lo que pueden hacer o a aquellos que tienen la sensación errónea de estar haciendo todo lo posible y más; todos y cada uno de nosotros, organicémonos, organicemos encuentros, reuniones, acciones,poniendo como primero punto en el orden del día la recogida y el sembrar para recoger para crecer, para reforzarnos tal y como es indispensable en estas semanas tan dramáticam

ente definitivas, en pro de un año distinto para evitar derrotas realmente dolorosas o trágicas.

Creo que existe una dificultad que puede parecer "técnica" y que en cambio es moral, de comprensión, de planteamiento: mucho más que la entidad de la cifra cotidiana de la inscripción, la disponibilidad de la "caja" de la suma global, anual de la cuota que se paga. Tener, aquí, la humildad, la fuerza, la claridad y el valor de ""pedir"", de explicar por qué se pide, de recurrir a préstamos, de vincularse con una "deuda" (y la deuda, lo debido a menudo da la fuerza, más que un crédito concedido) a otro, creo que es la mejor manera para pedir y sugerir al otro, a los otros, que se inscriban.

O para crear las premisas serias para una reflexión en este sentido, para poder dar a entender mejor "todo lo demás" del Partido Radical: tal vez el nexo entre la distinta calidad de vida interior y práctica de cada uno de nosotros, aquí, y la vida misma allí, en donde - de lo contrario - se condenaría y se vencería. Sí, creo realmente, compañeros, que una buena manera de hacer campaña a la esperanza, a la necesidad de crecer de calidad y en número, no de lograr que el Partido radical sea mayor sino que sea Grande, al igual que nosotros debemos ser Grandes, más fuertes en la tarea humana y políticamente extraordinaria de que hemos escogido o hemos tenido que escoger, pueda ser la de la honorable mendicidad - aunque no lo necesitásemos individual y materialmente - honorable mendicidad de laicos y de cristianos que saben que es mucho más difícil e importante pedir que dar; puesto que quién pide hace rico al que le pide que dé ...

Este periódico ha sido concebido sobre todo para informar a este respecto, para darle a todo el mundo un instrumento en este frente; y ello, en calidad de Secretario del Partido y de compañero, supone para mí ser el primero en empezar - tal y como debo - a pedir, mis riquísimas compañeras y mis riquísimos compañeros en paro, jubilados, sin casa, estudiantes de instituto, con familias enteras a cargo, con deudas de consumo obligatorio, toxicómanos, madres; así como los que tienen que pueden no cambiarse el coche, renunciar a vacaciones en lugares lejanos, espléndidas y caras, renunciar a comprarse una tercera casa, o a comprarse un barco, para ganar algún mes, en 1982 de militancia y de vida de compañeros que tal vez creéis haber perdido para siempre la capacidad y la posibilidad de vivir...

Necesitamos, compañeras y compañeros, el mayor de todos los pequeños y grandes "milagros laicos" que todos reconocen como mérito de este partido, de buen grado o de mal grado, haber realizado.

No hemos querido fijar cifras, "objetivos": pero es necesario, es menester, para Navidades, para finales de año, como buen augurio y como buen presagio, empezar el 1982 del holocausto o de la felicidad de la vida concebida, arrancada a la muerte que se cierne? es necesario, a partir de hoy, a partir de hoy realmente, compañeros que lees estas líneas, organizar la posibilidad de saber que nos estamos convirtiendo en muchos: y "muchos", tal vez "bastantes" para demostrar a todos que es posible "lograrlo", a "algunos" que es conveniente intentar lograrlo, a "nosotros mismos" que es justo, que tenemos razón al mantener la esperanza viva.

Vosotros lo sabéis, si reflexionáis, qué es lo que suponía si los medios de comunicación tuviesen que hablar de la imagen de un crecimiento del Partido, del valor y de los valores que se le han dado a través de las cuotas de inscripción, en las próximas semanas, que serán en cualquier caso decisivas, bajo muchos aspectos.

Usad inmediatamente, os lo pido, Radio Radical, a parte de Correos, los giros telegráficos, cuentas corrientes, cheques, lo que sea posible y prudente. Para anunciar, para dar ejemplo, dar ánimos y reconfortar a quienes desempeñarán la tarea de cubrir y de darnos este servicio. Gracias. Ahora pasamos, tal y como hemos anunciado y tal vez muchos esperan, a la huelga de hambre, a mi ayuno.

Un montón de explicaciones se hacen necesarias, porque probablemente no hay en mí mismo una suficiente todavía. Cada una es exacta, corresponde a razonamientos, a momentos realmente presentes, vividos. Pero ninguna, evidentemente, consigue ser suficientemente profunda; síntesis, conquista de una claridad adecuada, necesaria. De la misma manera intento de reagruparlos, de unir estos pensamientos.

La huelga de hambre indefinida cabe conquistarla a lo largo del ayuno. Conquistarla, hasta lograr una fuerza y una claridad interiores que sean claridad profunda, duradera sin contradicción. «Por suerte no creo en la dialéctica!. En la huelga de hambre la "antítesis" no es imaginable, porque destruye simplemente la tesis y se afirma a sí misma como "síntesis". No se puede, uno no se puede nutrir, y luego reanudar....

Para nosotros, no violentos, una decisión conclusiva, un compromiso que concierne a la vida, hasta tal punto de descontar aunque sólo sea hipotéticamente, el hacer que falte, el apagarla, no puede admitirse sin contradicciones, sin desmentir la esperanza - por lo menos en el punto en el que queda claro que te hallas ante tu último minuto, o segundo de vida... Pero cuándo, cuándo es posible decir que el "minuto" es el último, y no el penúltimo:. Ese penúltimo que es y debería ser el más posesivo en términos de vida por conquistar, el más socializado, el más común y comunitario y que hay que arriesgarlo con serenidad e intransigencia, hasta sus últimas consecuencias, en caída libre, sin red en la nada de la eternidad.

Es posible, me pregunto, esta suerte de matrimonio indisoluble, con el riesgo de la vida, hasta que se produzca una sucesión, en este matrimonio de la muerte en lugar de la vida?. La decisión de un momento, por qué fuerza o sello, por qué "sacramento", debería valer, ser respetado y no ser revisado, superado?. Pero hay más. Hemos comprendido, creo, que el ayuno "político", la huelga de hambre con lucha no violenta debe, y es bueno que sea, ser no simple gesto, no una suerte de actividad, sino una forma distinta, más grave, más rigurosa, más vigorosa y ejemplar de vivir la lucha, la confrontación con la violencia, crecer y reforzarla. Así pues, no la búsqueda del silencio interior, del recogimiento, dando por descontado que se gana en el aislamiento y en la casi inmovilidad. Se puede estar en la ermita, o estilita, y estar habitados por el jaleo ....

 
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