SUMARIO: Perfil humano y político de Roberto Cicciomessere, hombre de confianza de Marco Pannella, que toma las riendas de la secretaría del Partido Radical en 1983. Antimilitarismo visceral, cárcel por negarse a hacer la mili y personalidad enérgica y antipática caracterizan a este hombre, "dulcísimo, tierno y vulnerable" desde el punto de vista humano.

Algunos militantes se salen del Partido. Ello es visto por los radicales como un proceso de "purificación" en el que los que se alejan de las raíces radicales se alejan también formalmente del Partido. Pannella declara su desagrado ante la acción de Toni Negri, "revolucionario violento" quién, rompiendo su promesa, se entrega pacíficamente a la justicia.

(Juan Arias, "EL PAIS, jueves 3 de noviembre de 1983)

El discutido y vivo Partido Radical italiano tiene un nuevo secretario general, Roberto Cicciomessere, mientras el líder carismático del partido, Marco Pannella, apellidado ayer por Corriere della Sera como El Matador, El Mahatma, El Buen Pastor y el General de las huestes radicales, se queda como sombra y mastín del partido.

El nuevo secretario radical es Roberto Cicciomessere. Tiene 37 años y es todo un personaje, muy original y paradójico. Es un hombre de la máxima confianza de Pannella, pero muy diferente de aquél. Se define a sí mismo como "brutal, antipático y autoritario", pero las mujeres que lo han conocido de cerca aseguran que bajo su cáscara dura y amarga, es en realidad "dulcísimo, tierno y vulnerable".

De lo que no hay duda es que Cicciomessere es un antimilitarista visceral. Por no hacer la mili prefirió ir a la cárcel. Es hijo de un general jubilado pero ha sido siempre un pacifista hasta los huesos.

Había sido ya secretario del partido en 1970. Pero entonces aún no se había mostrado con toda su personalidad. También hoy, el momento por el que atraviesa el Partido Radical es distinto. Acaba de superar una ruptura interna que sus miembros llaman "purificación" porque, según éstos, se salieron los que no pertenecían al verdadero cuerpo radical. Pero el congreso que los radicales acaban de celebrar en Rimini ha puesto de manifiesto que en el partido de la rosa no faltan las espinas.

Lo han demostrado las votaciones para la elección del nuevo secretario con 217 abstenciones de 657 votantes. Y los radicales que predican la política del no voto y de la papeleta anulada han sufrido en su misma piel este problema, ya que en los votos anulados hubo expresiones muy sonoras contra el mismo Pannella, que sufre hoy la amargura de haber perdido su batalla pacifista con Toni Negri, quien no se ha entregado a la justicia como deseaba el líder radical y como se lo había prometido.

"En el fondo nos divide algo muy profundo", ha dicho Pannella a EL PAIS, "porque Negri es un revolucionario violento y yo soy un pacifista empedernido".