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Pannella Marco - 12 novembre 1986
Medio Ambiente
Intervención de Marco Pannella ante el Parlamento europeo

SUMARIO: Deplora la ausencia del Aula de la Comisión, del Consejo, del ponente: se niega a hablar en estas condiciones. Reanudando posteriormente el discurso, recuerda las previsiones pesimistas en materia de medio ambiente de un Haroun Tazieff, las amenazas del "efecto invernadero", la degradación del Rhin, etc.: "esta es la Europa que se anuncia". Está también de por medio la cuestión de Siria, el terrorismo, etc. Esta, en resumidas cuentas, es una Europa "infame"... El PE tendría que tener suficiente con los problemas de la agricultura y de la cría de bovino. Lo que tendría que ser importante es saber lo que va a pasar con los compromisos adoptados en Fontaineblau, con respecto al 1,6% del IVA [ para el hambre en el mundo? n.d.r.] Confía en que la Asamblea recoja la petición de los radicales de "interrumpir todas las ayudas a Siria".

(DISCUSIONES DEL PARLAMENTO EUROPEO, 12 de noviembre de 1986)

Pannella (NI). (FR) Es larga y costará muy cara esta llamada telefónica, señora Presidenta. Confío en que no corra por cuenta de la Comunidad, sobre todo porque podría brindar la ocasión a nuestros colegas Bonde y a otros para que hiciesen desagradables consideraciones sobre el modo en que gastamos dinero.

Señora Presidenta, querría precisamente que este no fuese un debate al "curry", pues, si bien tenemos al presidente de sesión, no tenemos ni al ponente, ni al comisario ni el Consejo. Simplemente un presidente de comisión muy distinto que, por el momento, se halla sumido en una conversación de lo más animada. «Señora Presidenta, esto no es un Parlamento! Usted preside... prefiero callarme. Si usted lo acepta, es asunto suyo. No mío.

Señora Presidenta, estoy diciendo que la Comisión brilla por su ausencia, el Consejo brilla por su ausencia, el ponente brilla por su ausencia, y es que el presidente de comisión se haya ocupado hablando. Yo me niego a tomar la palabra en estas condiciones.

Pannella (NI). (FR) No, no, no, señora Presidenta, he dicho sencillamente que me niego a tomar la palabra mientras usted no garantice un debate digno de este nombre.

Pannella (Ni) (FR), Señora Presidenta, su respuesta es totalmente insatisfactoria. Suya es la responsabilidad. Ahora, si permite, empezaré mi intervención.

Señora Presidenta, queridos colegas, creo haber leído hace algunas semanas que Haroun Tazieff es la ciencia, y que el divorcio entre ciencia y política es claramente una de las características de nuestra época, sea cual sea la política perseguida en un estado o en otro.

Haroun Tazieff nos ha confirmado, por enésima vez, que a lo largo de los próximos 25 años, es científicamente seguir que Europa meridional va a verse afectada por movimientos sísmicos como hace milenios que no se dan. Es un problema de vida, de muerte, de preparación de nuestros conciudadanos, hombres y mujeres, a estas futuras catástrofes. Es un problema de Francia, según Tazieff, y no ya sólo de España, de Italia, de Grecia o de Turquía. Ahora bien, nosotros no hablamos de ello. Por otra parte, señora Presidenta, constatamos que "el efecto sierra" anunciado por el Club de Roma hace ya quince años, actualmente se está produciendo. En efecto, se nos predice que asistiremos, en los próximos años, a un aumento de la temperatura de 4 o 5 grados, de manera que en la Europa del Sur se producirán temperaturas que actualmente conocemos a nivel del Sahara y de Africa.

Actualmente el Rin no es sólo una pesadilla inventada por los verdes o radicales o como se les quiera llamar, es para todos vosotros una demostración, una prueba de vuestra ceguera.

Todo ello es la Europa que se anuncia. Hay bosques que mueren. Siria, el terrorismo. Italia que, en el silencio cómplice de todo el mundo, ha devuelto, hace un mes, con aviones militares proporcionados por Spadolini a tres terroristas de Libia. Aquí he sido el único que ha protestado. Hoy tenemos la fiesta Chirac-Hassad, etc.

No se trata, señora Presidenta, de una Europa de marionetas y payasos, sino de una Europa infame, según la moral misma que los gobiernos quieren imponer a sus ciudadanos.

Por último, señora Presidenta, con motivo del presupuesto, empezamos a estar ya hartos de tanta historia de vacas. Nos ceñimos al almacenamiento de excedencias de carne bovina, de excedencias de leche, pero como Brassens en el mercado de Brivela-Gaillarde, acabaremos gritando: "Muerte a las vacas, viva la anarquía!". En efecto, la situación ya no es aceptable, Los medios técnicos de los que se habla son totalmente irrisorios, aunque la intención sea buena, puesto que el recurso a las financiaciones nacionales es un criterio totalmente perverso, un criterio que siempre hemos rechazado. Es peligroso llamarse a engaños y creer que de esta manera vamos a lograr nuestro objetivo.

Lo importante, señora Presidenta, es preguntarle a la señora Comisión, Señora Princesa, puesto que el Señor Rey brilla por su ausencia, es qué va a hacer con los compromisos adoptados en Fontainebleau. Tenía que proponernos para el 1 de enero de 1988 por lo menos el 1,6% del IVA. Para alcanzar dicho objetivo, la Comisión sabe que tiene que presentar una propuesta, que tiene que ser acogida por el Consejo, por el Parlamento y los doce Estados miembros. Ahora bien, qué hace la comisión, qué hacen estos señores comisarios? «Están llamando por teléfono a Dinamarca! Pues bien, es un mal para Europa, aunque tal vez sea un bien para nuestro debate... Realmente es tarea de nuestro Parlamento indicar semejante camino a seguir, como si fuese revolucionaria?

Y, mientras tanto, la Comisión no cumple, una vez más, sus deberes no ya políticos sino institucionales, puesto que sabe que desde hace 13 meses, al no haber cumplido los compromisos adoptados en Fontainebleu, le impide al Consejo, a los Estados miembros y al Parlamento proporcionar ese 1,6%. Lo que, señora Presidenta....

(Entran los miembros de la Comisión)

Pasen, señores, espero que su llamada por teléfono haya sido fructífera. Lo que, señora Presidenta, es totalmente grotesco....

(Entran los miembros del Consejo)

Gracias, estamos al completo, señora Presidenta; ve, no hay que desesperarse nunca...

(Hilaridad)

Sólo que sabemos que el 1,6% decidido en Fontainebleau no va a ser suficiente. Por lo tanto, mucho ruido y pocas nueces....

Señora Presidenta, en calidad de radicales, confiamos en que este año la Asamblea acoja nuestra enmienda, y que la Señora Comisión y el Señor Consejo acojan esta vez nuestra petición de suspender toda ayuda a Siria. El año pasado, el Parlamento hizo suya nuestra propuesta, salvo el grupo que representa la mayoría parlamentaria de Su Graciosa Majestad británica, que había votado en contra....

Señor Presidente del Consejo, representante de Su Graciosa Majestad, usted ha rechazado la propuesta de los radicales de esta Asamblea, quienes solicitaban la suspensión de toda ayuda a Siria. Espero que esta vez nuestro Parlamento vote, mañana, en dicho sentido. Espero que esta vez, no en nombre de un ideal, sino por básicos cálculos de estrategia antiterrorista, el Consejo quiera acoger nuestra propuesta que, confío, siga la misma que la del Parlamento.

 
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