Javier OrtegaSUMARIO: Unos 200 profesionales, entre funcionarios de prisiones, asistentes sociales, médicos, sociólogos, psicólogos y jueces, participaron en unas jornadas en Zaragoza sobre la droga y sus efectos y causas socio-jurídicas. Dichas personas llegaron a la conclusión de que una despenalización del consumo de drogas sería positiva pera contribuir a prevenir la toxicomanía y para apaliar el azote de la misma.
(Javier Ortega, "EL PAIS", 19 de diciembre de 1988)
Alrededor de 200 profesionales (funcionarios de prisiones, asistentes sociales, médicos, sociólogos, psicólogos, jueces y magistrados) que han participado en unas jornadas, celebradas en Zaragoza, sobre aspectos socio-jurídicos de las toxicomanías, se han mostrado partidarios de abrir un debate en la sociedad tendente a despenalizar el consumo de drogas.
Entre las conclusiones a las que han llegado los participantes en las sesiones figuran que la prisión no es el lugar idóneo para la rehabilitación de los toxicómanos, que los centros penitenciarios no reúnen en la actualidad las condiciones necesarias, en cuanto a recursos e infraestructura, para llevar adelante una política de reinserción de los delincuentes drogadictos, y que una asistencia sanitaria adecuada desde los primeros momentos de la vida es una manera eficaz a contribuir a prevenir las toxicomanías.
Tensión
El consumo de drogas en las cárceles, según estos expertos, crea tensión. Durante las jornadas se vio la necesidad de crear equipos multidisciplinares para la rehabilitación de delincuentes toxicómanos, así como de dotar de una mayor formación profesional y técnica a este personal.
Para lograr la reinserción social es necesario incrementar la coordinación entre los diversos colectivos y asociaciones que se ocupan de estas tareas y la propia Administración. No se trata de marginar a los toxicómanos en sitios especiales, sino de integrarlos.
Durante las jornadas se abordaron también temas relacionados con aspectos epidemiológicos, hábitos de consumo de drogas entre la población reclusa y la valoración médico-forense del problema de la droga.
Por otra parte, distintos profesionales han participado a lo largo de este año en las actividades organizadas por el gobierno autónomo de Aragón en el programa regional de formación en drogodependencia. Se trata de profesionales en psicología, asistentes sociales, sanitarios, sociólogos, jueces y juristas, y enseñantes.