SUMARIO: "O lo eliges o lo disuelves" ("O lo scegli o lo sciogli") fue el eslógan que provocó todo un impulso de entusiasmo y de generosidad de más de diez mil hombres y mujeres de todas partes del mundo que se inscribieron al Partido radical y paralizaron la decisión de cesar su actividad. Contra el poder subversivo de los medios de comunicación que habían trastocado la imagen y la identidad del Partido radical, la revuelta de los Premios Nóbel, de ministros, de parlamentarios, de sacerdotes, de escritores, de hombres de cultura, de ex-terroristas que se hicieron por primera vez en su vida el carnet de un partido. En estas páginas se hayan sus caras y sus palabras.
("Número único" para el XXXV Congreso del Partido radical - Budapest 22-26 abril 1989)
Al principio nadie creía que fuese posible crear un despliegue de entusiasmo, de generosidad, de inteligencia y de compromiso para con el Partido radical entre los que habían apreciado la acción de este grupo político tan poco convencional, tan distinto. Entre los que habían compartido una o varias batallas pero no se habían inscrito nunca. Entre los que se habían beneficiado de las reformas políticas provocadas por su acción. Con su Congreso de noviembre de 1985, el Partido radical dio por sentado que la organización de la información y de la comunicación se había constituido en poder subversivo de la democracia. Que la prensa y la televisión privaban al ciudadano, tanto de Roma como de Nueva York, del derecho primario y constitucional de conocer para poder juzgar, y consiguientemente para poder ejercer su soberanía democrática. Que esta situación marginaba y desmontaba desde un inicio los valores e ideales del Partido radical. Esos valores e ideales que en el pasado bastaba con comunicar a la opinión públi
ca para que ésta los reconociese como propios, dignos de compromiso civil y democrático. Un partido de ideas y de valores y no de poder, un partido que puede contar sólo con la aprobación de la opinión pública y no con el apoyo de los grupos de interés económico y social, un partido destinado a morir si se interrumpen los canales de comunicación con la sociedad civil. La decisión adquirió carácter imperativo: cesar la actividad. El Congreso, al definir las modalidades de disolución del Partido radical dejó abierta sólo una vía de salida posible: que se produjese un acto de revuelta no violenta de las personalidades del mundo de la ciencia, de la cultura, del espectáculo, de la parte más sensible de la opinión pública para con la censura realizada contra los ideales del Partido radical. El Congreso cuantificó también otra condición que podía impedir que se produjese la disolución del Partido radical, la de conseguir diez mil inscritos de cualquier parte del mundo en pocos meses. Así nació el slogan "o lo elig
es o lo disuelves". La respuesta superó nuestra capacidad de imaginación.
- tres Premios Nóbel con trayectorias y descubrimientos muy distintos entre ellos: Vassily Leontief, Rita Levi Montalcini y George Wald;
- de lo más hondo de la pena de muerte y de condenas casi seculares gran número de terroristas que en la fuerza de la propuesta no violenta de los radicales han encontrado la esperanza de vida;
- ministros de gobiernos africanos, parlamentarios italianos y europeos, israelíes y franceses;
- autores reconocidos entre los más grandes de nuestro tiempo, como Eugene Ionesco;
- disidentes soviéticos o polacos, como Leonid Pliusc o testimonios de nuestro tiempo como Marek Halter o tantos judíos comprometidos en el respeto de los derechos humanos en la URSS, como Avital Sharanski y Ham Marxgulis;
- sacerdotes y religiosos como Jean Cardonnel, Christian Delorme y Guy Gilbert;
- miles de delincuentes comunes detenidos en las cárceles así como sus familias;
- mujeres y hombres del mundo de la cultura, del espectáculo, de las artes, del teatro, de la música, de la pintura, del periodismo e incluso del deporte.
Y otros diez mil. Todos o casi todos declarando no haberse afiliado nunca a ningún partido en su vida, decidieron en pocas semanas, constituirse en el Partido radical de 1986 para que pudiese existir el Partido radical de 1987, de 1988 etc... Pero el cuarto y el quinto poder, la organización de la información y de la comunicación audiovisual y escrita consiguieron, pocos meses después, en 1987, la revancha por la excepcional movilización de entusiasmo e inteligencia que había suscitado el Partido radical. Entre los centenares de candidatos del Partido radical que se presentaron a las elecciones del Parlamento italiano, dieron con el hallazgo de la porno-diva Ilona Staller, »Cicciolina , que nuestra moralidad y nuestras reglas laicas nos imponían presentar como candidata por nuestras listas. De hecho, no entra en los márgenes del poder laico discriminar a una persona por sus costumbres sexuales. Una vez más, los medios de comunicación consiguieron convulsionar la imagen y la identidad del Partido radical borr
ando, bajo las tetas de Cicciolina, no sólo las personalidades que se habían adherido al Partido radical sino incluso a los mismos candidatos, entre los cuales se hallaban conocidos cirujanos, escritores, generales, mujeres y hombres conocidos por sus batallas sociales y democráticas en Italia y en Europa. Con las caras y las palabras de algunos inscritos al Partido radical queremos poner remedio, aunque sólo sea para los lectores de este periódico, al escarnio a la verdad que ha hecho la mayor parte de la prensa mundial. En estas páginas publicamos sólo algunas declaraciones de inscritos al Partido radical transnacional para que cada uno pueda identificarse con la trayectoria que corresponda de entre las muy diversas que figuran. Para que todos puedan conocer la cara del Partido radical y de los radicales y decidir si vale la pena alcanzar y dar fuerza a esta empresa política e ideal con su cara, con su trayectoria y con su compromiso.
George Wald
Estadounidense, profesor de bioquímica y Biología de la Universidad de Harvard, Premio Nóbel de medicina en 1967, inscrito al Partido radical en 1987.
»La razón por la que me complace estar inscrito al Partido radical es que veo que se trata de un partido que lucha por el bien del planeta, por cualquier forma de vida en la tierra y por el hombre. Es éste un partido sumamente necesario, porque las personas han de ser consideradas como tal, se encuentren donde se encuentren, y tengan derecho, estén donde estén, a que se les trate con respeto y humanidad. Hemos de buscar y recobrar nuestra humanidad, en todo el mundo.
Rita Levi Montalcini
Premio Nóbel de medicina inscrita al Partido radical en 1987.
»Como ciudadana libre y no en calidad de premio Nóbel, me siento llamada a expresar mi adhesión a la campaña no violenta a través del derecho a la vida y el derecho a la libertad absoluta que los estatutos del Partido reconocen a sus miembros. Pidiéndoles que cada año confirmen su adhesión y demostración de una gran sensibilidad democrática. Deseo que otros muchos ciudadanos libres hagan lo mismo .
Basile Guissou
Ex-ministro de información y ex-ministro de Asuntos Exteriores de Burkina Faso, uno de los países azotados por el hambre y la sed, inscrito al Partido radical. Actualmente es el Primer Secretario adjunto del Pr.
»Soy consciente de estar sirviendo a la causa de mi pueblo, de mi país y de todos los oprimidos del mundo. El Partido radical protagoniza acciones concretas que tienden a plasmar la justicia social en todos los países. Brindo mi más firme adhesión y apoyo a lo que considero una estrategia audaz, que se basa en actos de gran valentía política .
Leonid Pliusc
Matemático, disidente soviético exiliado en París, inscrito al Partido radical.Internado durante largos años en los hospitales psiquiátricos de la Unión Soviética, obtuvo la autorización para salir de la Unión Soviética gracias a una gran movilización de la opinión pública internacional. Participó en el Congreso del Partido radical de 1986 en Roma.
»La organización a la que pertenezco no es partidista, me inscribo a título excepcional porque apoya de manera desinteresada las mismas luchas que las nuestras y porque sus ideas y sus métodos son muy parecidos a los nuestros. Mi gesto es un gesto concreto de compromiso a favor de las luchas y del combate llevados a cabo por el Pr .
»Desde hace nueve años estoy siguiendo la acción del Pr en el campo de los derechos del hombre en los llamados países socialistas y de las relaciones entre Occidente y el bloque de Varsovia. Aun a pesar de no compartir totalmente la política de los radicales, considero que muchas ideas y muchos métodos de este partido son necesarios para resolver los problemas de la actual situación internacional.
»El Pr "provoca" constantemente a los políticos europeos y les incita a buscar nuevos métodos de lucha por la paz y por los derechos del hombre .
Eugene Ionesco
Dramaturgo rumano, inscrito al Partido radical en 1987.
»Las propuestas y las ideas de este Partido radical reflejan lo que mi corazón alberga: yo soy violentamente no violento. Si este partido tuviese que cesar su actividad sería desastroso porque lleva en su seno las semillas de una espiritualidad que puede resultar infinitamente beneficiosa para los hombres. Yo quisiera hacer algo y no puedo. Lo único que puedo hacer es inscribirme y militar en calidad de extranjero, si me lo permitís, en este partido. Os aseguro que con mis débiles fuerzas haré todo lo que esté en mis manos .
Saikou Sabally
Ministro de agricultura de Gambia, ex ministro de asuntos
exteriores, vicepresidente del Consejo Mundial de la Alimentación.
»Como gambiano vivo directamente los problemas del hambre y del desarme. Es por ello que he decidido sumarme al Partido radical en su lucha contra los problemas del hambre y del desarme, que aquí en Africa cobran dimensiones particularmente graves .
Arturo Goetz
Secretario del Comité para la seguridad alimentícia en América Latina. Argentino.
»La lucha contra el exterminio causado por el hambre es la prioridad absoluta de nuestros días. Sólo gracias al Partido radical la necesidad de combatir se convierte en el centro de la atención y de la batalla política de pueblos y gobiernos; sin el Partido radical esta batalla se marginaría de nuevo. Por eso me he inscrito, para impedir que con el Partido radical muera una gran esperanza para quién muere de hambre .
Jean J. De Felice
Abogado del Tribunal de Casación de París, se inscribió en 1987.
»Para mí es obvio que el Partido radical no debe morir. Me solidarizo totalmente con la lucha que está llevando a cabo desde hace tantos años a favor de la democracia, del derecho y contra todas las razones de Estado .
Anatoli Dubkov
Redactor de la revista socio-política independiente "Slovo" ("La Palabra"), difundida principalmente en la ciudad de Leningrado.
»He tenido la ocasión y la suerte de conocer el estatuto del Partido radical, fundado en Italia, que está atravesando una fase de remodelación transnacional. Apoyo plenamente el preámbulo del estatuto - que he leído con atención - y todos los principios de este partido. Considero especialmente importante que los radicales no tengan una "ideología" y ni tan siquiera un "programa" normal, porqué en realidad su programa ya ha sido formulado anteriormente en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, en otros pactos sobre los derechos civiles y en las Constituciones de los países democráticos .
André Bercoff
Periodista y escritor francés.
»Lo que más me gusta del Partido radical - que pronto será europeo - es que está preparado tanto para morir como para vivir, para destruirse como para brotar. Me gusta que, a la inquietud existencial de una política que nunca ha sabido por qué identidad apostar, Marco Pannella y sus amigos aporten una mezcla indispensable de espiritualidad gandhiana y de burla de la Comedia que caracteriza estos tiempos de incertidumbre en las sociedades que ya no saben si son ellas las que escriben la historia o si es la historia las que las borra .
Jean Cardonnel
Sacerdote dominico, teólogo.
»Es más fácil ser extremista que ser radical. La solidaridad entre hombres y mujeres, entre gentes que deseen construir un mundo libre es necesaria. De ello depende nuestro futuro, debemos poner punto final al exterminio causado por el hambre, característico de un capitalismo salvaje que integra los socialismos oficiales en su circuito económico. Veo esta necesidad como la expresión política de mi fe en el amor fraternal. Este es el motivo de mi adhesión al partido que con valor se rebela contra el orden brutal de las cosas, al partido de una lucha no-violenta contra todas las violencias que se le han hecho al hombre: al Partido radical .
Marek Halter
Intelectual, judío, fundador de "SOS racisme", inscrito al Partido radical en 1987.
»La Biblia dice que mientras un rey acepta que un profeta le interrumpa, la libertad existe, cuando no sucede así y el rey encarcela al profeta, la libertad muere. En cada país existe un grupo que hace de profeta, en Italia es el Partido radical el que desempeña este papel. Me doy cuenta de que la única manera de apoyar al Partido radical es inscribiéndose y estoy contento de hacerlo .
Miguel Bosé
Cantante
»Sólo unas palabras de solidaridad para defender el espacio que el Partido radical ha venido conquistando a lo largo de su breve pero decisiva historia, construida a partir de principios, ideales y luchas que ningún otro partido ha tenido el valor de afrontar, siendo el alma generadora de nuevas alternativas. Por esta razón me uno a vosotros, insribiéndome y esperando que el Partido radical prosiga su acción y tenga una larga vida dando algo de mí mismo para formar parte de él .
Shulamit Aloni
Diputada del Parlamento israelí (Knesset), líder del Partido de los derechos civiles, declaró:
»Estoy orgullosa de inscribirme al Partido radical internacional, que está luchando a través de la democracia política a favor de los derechos civiles fundamentales, la igualdad de todos los pueblos, la paz y la dignidad humana para todos los ciudadanos y para todas las naciones. Sé que cada uno de nosotros debe entrar a formar parte de los 10 mil que combaten por una vida mejor, por la fraternidad y por la libertad del espíritu, por la creatividad y la libre iniciativa de cada cuál, y para trabajar juntos más allá de las fronteras nacionales, de la respectiva fe religiosa y de otras barreras .
Avital Sharanski
Esposa de Anatoli Sharanski, inscrita al Partido radical, ha declarado a "Noticias radicales" desde Jerusalén:
»Me he inscrito al Partido radical internacional porque quiero que sus justas luchas por los derechos humanos de todos y en todas partes sean cada vez más fuertes y más numerosas. Hablé con compañeros del Pr cuando intentaba obtener la libertad de mi marido y el derecho de volver a Israel, y su solidaridad ha influido para que nosotros podamos estar juntos aquí, en Jerusalén. Para Joseph Begun, para todos los judíos que sufren persecuciones en la Unión Soviética, por los derechos humanos y civiles, organizados juntos, juntos lucharemos en estos días de 1986, y desde el inicio de 1987, con fuerza y esperanza .
Georges Donnez
Francés, presidente del "Parti Social Démocrat", vicepresidente de la Comisión jurídica del Parlamento europeo.
»El Partido radical ha desempeñado un papel importantísimo en la construcción de Europa y, a través de ella, en el acercamiento de los europeos promotores del Humanismo. Aprecio especialmente la lucha incesante que el Pr ha llevado a cabo contra el hambre en el mundo, lucha con la que me he sentido totalemte solidario. Es indispensable para la democracia en general, y para la defensa de la libertad en particular, que el Pr continue su lucha. Le deseo larga vida. Espero que mi modesta adhesión sirva de estímulo fraternal para continuar el camino común que hemos trazado .
Vassili Leontief
Premio Nóbel de economía, inscrito al Partido radical en 1987.
Leontief es uno de los Premios Nóbel que han firmado el Manifiesto-llamamiento contra el exterminio causado por el hambre en el mundo y forma parte de la junta directiva de la organización "Food and Desarmament International".
»Me inscribo al Partido radical porque creo que debe contar con más fuerzas para sus luchas políticas internacionales en defensa de los derechos humanos, de la paz y de la vida .
Alexander Lerner
Cibernético, miembro de la Academia de Ciencias de la URSS, ex "refuznik", emigró a Israel en enero de 1988.
»El partido que en Italia se llama "radical", y que en realidad es un partido transnacional, subraya la exigencia de que se respeten los derechos humanos en todos los países, entre ellos la Unión Soviética, y se interesa mucho por el problema de la repatriación de los judíos de la Unión Soviética. Ya que este partido promueve acciones no-violentas, porque sostiene los principios morales del respeto de los derechos de la persona, experimento una gran simpatía por su actividad. Apoyo encarecidamente los esfuerzos de este partido y espero que éstos resulten fecundos .
Fernando Savater
Filósofo, escritor, columnista de "El País".
»En Italia los radicales han salvado muchas cosas. Han sido los promotores del referéndum sobre el divorcio y sobre el aborto. Italia ha sido el primer país que ha votado contra la energía nuclear. Los radicales han promovido seriamente la reforma de la justicia. No se trata de fundar en España una cosa similar. La propuesta actual es que en Europa exista un sólo Partido radical y que sea absolutamente europeo e internacional .
Christian Delorme
Sacerdote católico. Conocidísimo promotor de movimientos de ayuda y solidaridad con los marginados. Delorme está inscrito al Partido radical.
»El Partido radical es el único partido en el mundo que se define no-violento, que hace de la lucha contra el exterminio a causa del hambre una acción prioritaria, que alberga en su seno a todos los que generalmente son excluídos de los demás partidos porque pertenecen a esas minorías que la sociedad rechaza. El Pr es también único por su voluntad de no ser un partido "nacional" sino que está abierto a todos aquellos que, más allá de las fronteras italianas, comparten el mismo amor por la paz, por la democracia y por la libertad .
Cherna Goldort
Inscrita al Partido radical, era una "refuznik", una judía soviética confinada en un "lager" de Siberia y no se le permitía emigrar a Israel, en donde reside actualmente.
»Cuando me hice miembro del Partido radical con una inscripción por teléfono desde Siberia, nunca creí que os podría ver en persona. No sabía con exactitud que era el Partido radical ni de qué problemas se ocupaba. Ahora lo conozco más a fondo y he comprendido que mi destino, mi vida personal es sólo una pequeña parte de los problemas de los que os ocupáis. Pero aunque yo no sea más que una pequeña parte, mi presencia aquí demuestra que vuestros esfuerzos no han sido en vano y que incluso de países como la Unión Soviética se pueden obtener resultados concretos .