SUMARIO: La moción presentada por Anna Niedzwiecka, Marek Krukowski, Ferec Parcz, Felix Karman, John Boch, Orna Csillag, Valentin Streltsor, Nikolai Jramov y Daniel Vetrovski en el Consejo federal reunido en Roma del 2 al 7 de enero de 1990, ha sido acogida como declaración con 53 votos a favor y una abstención.
El futuro desafía a la democracia. Pero la democracia no nace sólo en las instituciones parlamentarias sino gracias a los esfuerzos de la sociedad misma. El principio fundamental de la democracia es la defensa de los derechos de las minorías. La democracia no puede existir aisladamente, no se puede limitar a un sólo Estado o a un sólo grupo: es un problema transnacional que no se puede encasillar en ningún tipo de fronteras,
Europa necesita una democracia transnacional basada en los principios del federalismo, federalismo voluntario con igualdad de derechos para todos los grupos y comunidades étnicas. Para cada uno de ellos se deben establecer condiciones de participación en la federación, y ello concierne no sólo a los italianos, belgas, húngaros, portugueses o polacos, sino a los lituanos, los croatas, los letones, los vascos, los ucranianos y los demás pueblos.
Es la condición necesaria para lograr una realización total de las libertades económicas, culturales y políticas de cada cual.
Nosotros entendemos el federalismo no sólo como federalismo de los Estados, sino también de las comunidades, de los grupos étnicos etc.
Esta es la idea de un auténtico federalismo.
Europa debe proponer una elección transnacional y supraestatal basada en la igualdad de los derechos de todo el mundo. Es la única solución política de los problemas globales que plantea el futuro.