Radicali.it - sito ufficiale di Radicali Italiani
Notizie Radicali, il giornale telematico di Radicali Italiani
cerca [dal 1999]


i testi dal 1955 al 1998

  RSS
gio 22 mag. 2025
[ cerca in archivio ] ARCHIVIO STORICO RADICALE
Archivio Partito radicale
Partito radicale - 28 settembre 1994
Mariateresa Di Lascia
Adriano Sofri

SUMARIO: Adriano Sofri recuerda a Mariateresa Di Lascia en su compromiso político, pero también como escritora. Su última obra es "una novela larga y segura de sí misma, que no tiene miedo a hablar de lo que hay que hablar, de la gloria y de la caída, del amor entre primos, de sortilegios y mentiras".

(CUORE, 17 de septiembre de 1994)

Ha muerto en Roma Mariateresa Di Lascia. Tenía cuarenta años y desde siempre había hallado en el Partido radical el lugar en el que dedicarse a las buenas causas, las grandes y las minúsculas. Era, con su compañero Sergio D'Elia, la más admirable promotora de la Liga contra la pena de muerte; los amigos de "Cuore" igual se la han encontrado por este motivo en las fiestas del periódico. No sé decir cuánta gente en todo el mundo ha sido socorrida por Mariateresa cuando hacía falta, a tiempo, tosca y apasionadamente. En Sarajevo hay chiquillos que van por ahí tan orgullosos de su Swatch de colores, y no saben que fue ella quién se los regaló. Cayó enferma un buen día, y tardó en saber que se trataba del cáncer. Hace pocos días me dijo: "Yo lo hago todo muy bien". Mariateresa Di Lascia conocía a mucha gente y muchos la conocían. Había sido parlamentaria. Pero guardaba un secreto valioso y celosamente escondido. Era una escritora, una gran escritora. Una novela suya iba a ser publicada dentro de pocos meses. Era

el primer reconocimiento de su valor de escritora fuera de un círculo muy estrecho de personas. Es una novela larga y segura de sí misma, que no tiene miedo de hablar de lo que hay que hablar, de la gloria y de la caída, del amor entre primos, de los sortilegios y las mentiras. Había en Mariateresa una intuición misteriosa y soberana, el lado secreto de la eficacia apresurada de sus buenas acciones políticas y privadas. Su novela es hermosa, y está escrita con una fuerza de sentimientos, de palabras y de estilo que puede tener sólo quién no busca reconocimiento en el juicio de los demás ni en la opinión pública. El genio de narradora de Mariateresa echaba cuentas sólo consigo mismo. Por otra parte, tal y como sucede en muchos ejemplos grandes, de la escritura, Mariateresa esperaba que los demás la conociesen mejor y la quisiesen. No ha tenido tiempo. Estas pocas líneas son un tributo provisional de reconocimiento personal y de reconocimiento de una personalidad especia.

 
Argomenti correlati:
stampa questo documento invia questa pagina per mail