Bruselas, 19 abr (EFE). La Comisión Europea consideró hoy, miércoles, que el acuerdo alcanzado entre la Unión Europea (UE) y Canadá sobre el reparto de las cuotas de fletán en 1995 en aguas del Atlántico Norte "es el mejor posible teniendo en cuenta las
difíciles condiciones" en que se produjo.
Un portavoz comunitario señaló que "todavía queda mucho trabajo por delante hasta que este acuerdo bilateral se convierta en multilateral en la Organización de Pesca del Atlántico Norte" (NAFO).
La UE y Canadá alcanzaron un acuerdo el pasado domingo por el que la flota comunitaria pescará en 1995 una cantidad suplementaria de 5.013 toneladas de fletán, que se añaden a las ya capturadas este año y que se cifran entre 6.000 y 7.000, así como el 41 por ciento del total de capturas que se fijen en 1996.
La NAFO, con el acuerdo comunitario, cifró en 27.000 toneladas las capturas de fletán negro en esa zona para este año.
El acuerdo sitúa en el 31 de diciembre de 1995 la "fecha guillotina" para que se haga multilateral el compromiso alcanzado a nivel bilateral en el seno de la NAFO, pues de lo contrario será considerado nulo.
El ejecutivo comunitario felicitó a la comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, por la manera en que condujo estas negociaciones que duraron 44 días y que afectaron principalmente a España y Portugal, los dos países con la flota pesquera más importante de la Unión.
El portavoz de Bonino recordó hoy que todavía no se ha procedido al reparto entre España y Portugal de las cuotas obtenidas en este acuerdo, y que la Comisión Europea prepara una propuesta.
Asimismo señaló que "la Comisión Europea no tiene nada que decir" sobre las declaraciones del primer ministro del Reino Unido, John Major, de que la Marina británica está preparada para asegurar el cumplimiento de las reglas comunitarias de pesca.
"Esa es responsabilidad de Major y del gobierno del Reino Unido", dijo el portavoz.
La postura británica de apoyo a Canadá durante todo el proceso de negociación dificultó la posición comunitaria y provocó la acusación de España al Reino Unido de haber roto la solidaridad comunitaria.