Pontevedra (España), 12 jun (EFE).- Unos 300 marineros españoles afectados por la falta de acuerdo pesquero con Marruecos han ocupado hoy lunes la sede de la Diputación provincial de Pontevedra (noroeste) e impiden la salida del edificio a los funcionarios.
La acción, convocada por la organización Convergencia Intersindical Gallega (CIG) dentro de las movilizaciones de protesta por el retraso en el logro de un nuevo acuerdo pesquero con Marruecos, que negocia la Unión Europea con el Gobierno de Rabat, se inició a las 10.30 horas (8:30 GMT).
Poco después los encerrados accedieron a abrir la puerta del edificio para facilitar la salida a las personas ajenas a la Diputación que se hallaban alli realizando gestiones.
Las diputaciones son los organismos que se encargan de tramitar y llevar a cabo las inversiones del Estado en las provincias.
Los marineros, procedentes de Marín, Cangas, Moaña y otras localidades costeras, llegaron hoy a Pontevedra en varios autocares y realizaron una concentración ante la Autoridad Portuaria antes de acudir a encerrarse en la Diputación.
Los participantes en la protesta son marineros enrolados como tripulantes en los pesqueros que están afectados desde mayo pasado por el amarre forzoso de la flota congeladora española que faena habitualmente en el caladero canario-sahariano.
Los portavoces de los marineros, los sindicalistas Manuel Caamaño y Xabier Aboi, señalaron a la prensa que su intención es mantenerse encerrados indefinidamente, hasta que consigan una entrevista "con una alta autoridad".
Tras comenzar el encierro los marineros desplegaron una pancarta en el tejado del edificio, con el texto: "sector pesquero, soluciones", y otra en la balconada principal, que dice: "encerrados por la falta de acuerdo con Marruecos. Marineros del caladero canario-saharaui".
Las negociaciones entre la UE y Marruecos quedaron interrumpidas el pasado jueves y sin fecha de reanudación. El ministro español de Asuntos Exteriores, Javier Solana, señaló el sábado que el futuro acuerdo debe ser "equilibrado" y consideró "inaceptable" la actual posición marroquí.
Solana asistió el sábado a una reunión, en Madrid, entre el presidente del Gobierno español, Felipe González y la comisaria de Pesca de la UE, Enma Bonino, para analizar la marcha de la negociación. El acuerdo debe sustituir al que expiró el pasado 31 de abril, día desde el que unos 720 pesqueros europeos, de ellos 650 españoles, que faenaban en el caladero marroquí, permanecen amarrados en puerto.
Marruecos demanda una reducción de hasta el 65 por ciento de lo que pesca la flota comunitaria, mientras que la propuesta de la Unión Europea contemplaría un descenso en las capturas de entre el 10 y el 30 por ciento, según las especies.