Por Javier Otazu Rabat, 30 jun (EFE).- Marruecos está permanentemente dispuesto a negociar un nuevo Acuerdo de pesca con la Unión Europea, pero "sólo depende de Bruselas, pues hasta ahora siempre ha sido la UE la que ha fijado la fecha y duración de las rondas negociadoras", dijeron a EFE fuentes cercanas a los negociadores marroquíes.
En esta línea argumental, las fuentes aseguraron que la propia comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, pidió en su día a las autoridades marroquíes que las negociaciones no volvieran a reanudarse hasta pasadas las elecciones municipales en España, el pasado 28 de mayo.
Las fuentes aseguraron que los negociadores europeos nunca han presentado, a lo largo de las cinco rondas negociadoras, una contrapropuesta concreta en la que se recojan cifras de reducción de capturas, como se había dado a entender por parte de los negociadores europeos, aunque también afirmaron que las cifras de reducción no son negociables.
Las reducciones pedidas por los marroquíes -de 30 a 65 por ciento, según las especies- "no son una oferta de negociación, es nuestro mínimo para reconstituir un caladero en peligro, y los europeos deben saber que no estamos dispuestos a regatear, como si fuera el zoco de las alfombras", añadieron las fuentes.
Insistieron en que Marruecos propone escalonar estas reducciones en tres plazos "en consideración a los pescadores españoles", y recordaron que el gobierno de Rabat ha congelado desde 1.993 las inversiones en el sector para no sobrecargar el caladero, "y estos sacrificios que nosotros consentimos deberían ser comprendidos por los europeos".
"Los negociadores europeos se han limitado a hablar de generalidades", lo que "nos hace tener la impresión de que sólo quieren ganar tiempo", porque "hasta ahora no hemos visto por su parte voluntad de llegar a ningún acuerdo, y no hemos podido celebrar una verdadera reunión de trabajo", afirmaron.
Tanto los responsables de la Comisión Europea como de España comprenden la posición marroquí -continuaron- "pero en España falta la valentía política de decirlo abiertamente, por miedo a la opinión pública de un país que ahora tiene muchos problemas".
Las fuentes aseguraron que la comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, pidió a los marroquíes en su primera visita a Rabat a finales del mes de abril que las negociaciones se suspendieran hasta después de las elecciones muncipales españolas del pasado 28 de mayo.
"El 'partenariado' no aporta nada nuevo" -recordaron las fuentes- en alusión a la propuesta de la comisaria de promover un nuevo modelo de asociación euro-marroquí en las actividades pesqueras y afines.
"Ya existe en Marruecos un marco muy claro para las actividades de cooperación y la creación de sociedades mixtas", agregaron las fuentes, y desmintieron que las empresas extranjeras estén obligadas a ceder la mayoría de las acciones de una empresa pesquera a un socio marroquí.
Según su versión, el inversor extranjero puede controlar incluso el cien por cien de las acciones si la empresa pesquera está establecida en tierra, y sólo en el caso de las actividades de extracción -es decir, de los barcos pesqueros- se obliga a ceder el 50 por ciento de las acciones a un socio marroquí.
Desde el pasado uno de mayo, fecha en que expiró el anterior acuerdo pesquero euro-marroquí, cerca de 700 barcos europeos -en su mayor parte españoles- que faenaban en los caladeros de este país están amarrados a puerto, a la espera de los resultados de lasnegociaciones.