Bruselas, 28 jul (EFE).- La Unión Europea (UE) y Marruecos celebrarán el próximo 11 de agosto en Bruselas una nueva ronda de negociaciones para lograr un acuerdo de pesca, señalaron hoy, viernes, a EFE, fuentes comunitarias.

"Esta va a ser la última ronda negociadora antes de la firma del acuerdo, prevista para el mes de septiembre en Rabat, con la participación del Rey Hasán II", afirmaron las fuentes.

En principio, la fecha del inicio de la nueva ronda negociadora estaba prevista para el día 8 en Rabat, pero conversaciones de última hora entre representantes comunitarios y marroquíes han decidido que se celebre en Bruselas y en esta nueva fecha.

Las negociaciones entre la Unión y Marruecos se relanzaron el pasado día 26 de julio, cuando ambas delegaciones iniciaron las conversaciones para conseguir un acuerdo mediterráneo de asociación, que "debía ir indisolublemente ligado al desbloqueo de las negociaciones pesqueras", dijeron las fuentes.

La sesión plenaria en la que se retomaron las conversaciones para un acuerdo de cooperación se desarrolló en un clima calificado de "positivo" por funcionarios comunitarios, que apostaron por un comienzo de la negociación de pesca a mediados de agosto.

Fuentes diplomáticas españolas señalaron, asimismo, que "siempre hemos considerado que las dos negociaciones deben ser paralelas, por lo que era normal que Marruecos respondiera con una inmediata ronda pesquera".

La reunión "secreta" que ayer mantuvieron en Ginebra la comisaria de Pesca, Emma Bonino, y el ministro marroquí del ramo, Mohamed Sahel, sentó las bases para que ambas delegaciones puedan comenzar la "posiblemente definitiva ronda negociadora", dijeron a EFE fuentes comunitarias.

Emma Bonino ha insistido en varias ocasiones en relacionar el acuerdo de asociación con el de pesca, "de tal forma que no pueda existir el uno sin el otro".

Las negociaciones para el Acuerdo de Pesca entre la UE y Marruecos se encuentran estancadas después de cinco rondas negociadoras, debido sobre todo a la pretensión marroquí de reducir drásticamente la cuota de capturas entre un 30 y un 65 por ciento.

Rabat también pide un incremento del 35 por ciento de los tripulantes marroquíes en los barcos comunitarios y el desembarco de la pesca capturada en sus puertos antes de transitar a los mercados europeos.

Más de 650 barcos pesqueros comunitarios (la mayor parte de ellos españoles) que faenan en el caladero marroquí están amarrados desde que concluyó el anterior acuerdo, el pasado primero de mayo.

La parada de la flota ha dejado sin trabajo a unas 30.000 personas entre tripulantes e industria transformadora.

El acuerdo con Marruecos es el más importante que tiene la UE en el sector pesquero, tanto por el volumen de barcos y capturas, como por la compensación económica que recibe ese país -que ha sido de 130 millones de ecus anuales (unos 21.500 millones de pesetas) en los últimos tres años- parte de ella para el desarrollo de su propio sector de pesca.

La Comisión Europea se resistió las pasadas semanas a desbloquear las negociaciones para el acuerdo de asociación en un intento de forzar la reanudación de las conversaciones pesqueras, aunque finalmente cedió "como un gesto hacia la parte marroquí".

En este sentido, el Ejecutivo comunitario, a petición de los comisarios Manuel Marín y Enma Bonino, aprobó el pasado miércoles una mejora sustancial del régimen temporal favorable a la exportación del contigente de sardinas en lata marroquíes a la Unión.

La Comisión Europea también ha asegurado que las exportaciones de cítricos de Marruecos hacia los países de la UE se realizarán en mejores condiciones de cómo lo harían a partir del próximo 1 de enero de 1996, cuando entre en vigor para estos productos el Acuerdo General de Aranceles y Aduanas (GATT).