RABAT ADVIERTE QUE NO NEGOCIARA CON EUROPEOS BAJO AMENAZAS Bruselas, 28 ago (EFE).- Marruecos asegura que no negociará
bajo amenazas el nuevo convenio de pesca con la Unión Europea
(UE), en reacción al anunció hecho hoy en Bruselas de suspender
indefinidamente las conversaciones y la "indignación" en el sector
pesquero español, el más perjudicado por el bloqueo.
La sexta ronda negociadora se cerró tras el rechazo marroquí a
la ultima oferta comunitaria de reducir al menos en un 25 por
ciento las capturas de cefalópodos (pulpo y calamar) y con la
denuncia de la comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, de la
falta de voluntad negociadora de Rabat.
La ruptura de las conversaciones ha abierto una crisis sin
precedentes en las relaciones entre la UE y Marruecos, y no se
sabe si habrá nuevas reuniones bilaterales.
La italiana Bonino declaró en Bruselas que piensa proponer que
"se revise el conjunto de las relaciones" entre la Unión Europea y
Marruecos.
Los negociadores descartaron fijar la fecha de una nueva ronda
y Bonino reaccionó con una propuesta para "revisar" el conjunto de
todas las relaciones de la UE con Marruecos, y otra de ayudas para
el sector afectado por la falta de acuerdo en España y Portugal.
Marruecos señaló esta noche en un comunicado del Ministerio de
Asuntos Exteriores, difundido por la agencia oficial MAP, que "no
se dejará dictar una solución bajo la amenaza".
Para el gobierno de Rabat, las eventuales medidas de boicó
contra los intereses de Marruecos anunciadas hoy por varios
sindicatos pesqueros españoles no conseguirán cambiar su posición.
El comunicado marroquí señala que el país magrebí "no se
dejará influir por las acciones de bloqueo llevadas a cabo por
ciertas organizaciones de pescadores españoles, unas acciones que,
en nuestra opinión, perjudican a sus autores".
Recuerda que Rabat "no ha hecho comentarios sobre el
desarrollo de las negociaciones por una razón bien simple:
mientras la negociación está en curso, es aventurado pronosticar
la salida", en alusión probable a las informaciones de que se
alcanzaría un acuerdo antes del 1 de septiembre.
Sin embargo, "lamentamos que ciertos responsables europeos
hayan creído necesario hacer declaraciones a este respecto, que
han creado una confusión que no ayuda para nada a la solución del
problema".
En cualquier caso, Marruecos, que no dijo nada sobre la
eventual reanudación de las conversaciones, añadió que retomó la
anterior negociación "con un espíritu de seriedad y con la
esperanza cierta de llegar a una solución que proteja tanto
nuestros recursos como los intereses de las diferentes partes".
Para Bonino, empero, es la UE la que ha mantenido una "postura
firme, razonable y prudente", mientras "Marruecos no ha mostrado
voluntad para negociar despues de cinco meses", precisando que
había llegado el momento de "sacar a la luz quién quiere y quién
no quiere negociar".
Bonino presentará la propuesta a la Comisión Europea en su
reunión del próximo 6 de septiembre, cuyo contenido podría incluir
el aplazamiento de la negociación del nuevo acuerdo de asociación
para Marruecos, para el que la UE disponía de cerca de 1.000
millones de ECUS (1.290 millones de dólares) en ayudas para el
reino alauí.
Además, Bonino anunció "un examen exhaustivo de todas las
ayudas necesarias para el sector pesquero" si finalmente no se
reconduce el acuerdo.
El presidente de la Asociación de Armadores de Andalucía,
Pedro Maza, manifestó que ahora correspondía a la UE y al Gobierno
español "tomar las medidas pertinentes para afrontar la situación"
y evitó una decalaración de guerra contra todos los productos
procedentes de Marruecos que transiten por los puertos españoles.
En toda España son unos 570 barcos y unos 7.500 marineros los
afectados directamente por la falta de acuerdo y que podrían ser
objeto de ayudas, pero hay más de 40.000 puestos de trabajo
relacionados con la actividad pesquera en las regiones de
Andalucía, Canarias y Galicia que pueden perderse y para los que
no hay previstos subvenciones.
Los pescadores españoles reaccionaron con indignación y
críticas a Marruecos y anunciaron el endurecimiento de sus
acciones de protesta ante la ruptura de la ronda negociadora.
El secretario general de Pesca español, José Loira, llamó a la
calma a los pescadores, mientras que los trabajadores y los
sindicatos del sector en Andalucía, Galicia y las islas Canarias
expresaron su malestar y anunciaron medidas contra los intereses
de Marruecos.
Desde que el 30 de abril pasado concluyera la vigencia del
acuerdo pesquero anterior, más de 650 barcos pesqueros de la UE
(la mayoría españoles) que faenan en el caladero marroquí
permanecen amarrados, lo que ha dejado sin trabajo a una 30.000
personas, entre tripulantes e industria transformadora. EFE