Por Javier Otazu.

Rabat, 14 sep (EFE).- La comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, rehusó decir hoy, jueves, a su llegada a Rabat si trae una fecha de negociación que proponer a las autoridades marroquíes y se limitó a recordar que ha venido a Marruecos "para explorar".

Bonino, que viajó acompañada por el negociador John Spencer, llegó a la base militar de Rabat-Salé a las 17.00 GMT y fue recibida por el ministro de Pesca marroquí, Mustafá Sahel, y los representantes de la Comisión Europea en Rabat.

La comitiva se dirigió inmediatamente a un hotel de Rabat, donde a su llegada Bonino hizo unas breves declaraciones en las que aseguró que ha venido para "explorar las condiciones" en las que se pueden retomar las negociaciones para un acuerdo de pesca euro-marroquí.

Preguntada por EFE sobre si tenía una fecha que proponer a sus interlocutores marroquíes para retomar la negociación, la comisaria se limitó a responder: "No sé nada, acabo de llegar".

Emma Bonino tiene previsto reunirse con el ministro marroquí de Pesca esta misma noche para celebrar una "cena de trabajo" y los dos responsables volverán a verse en la mañana del viernes, según informaron fuentes del Ministerio de Pesca.

En cuanto a una posible reunión de Bonino con el primer ministro, Abdelatif Filali, ninguna fuente, ni marroquí ni europea, quiso hoy confirmarlo.

En principio, la comisaria debe abandonar Rabat mañana al mediodía, tras ofrecer una rueda de prensa sobre los resultados de sus gestiones, según el programa anunciado por los representantes europeos en Rabat.

El último acuerdo de pesca entre Marruecos y la Unión Europea (UE) expiró el 30 de abril, y desde entonces los cerca de 700 barcos europeos (650 de ellos españoles de Canarias, Andalucía y Galicia) están amarrados a puerto.

Tras seis rondas de negociaciones, las dos partes no han logrado todavía acuerdos sustanciales sobre ninguno de los puntos en discusión y, especialmente, en el tema de la reducción de capturas las posiciones están muy alejadas.

Mientras que Marruecos pide que los pesqueros europeos reduzcan sus capturas desde un 65 por ciento para los cefalópodos hasta un 30 y un 50 por cien para otras especies, la UE solo ha ofrecido, hasta el momento, una reducción de un 25 por ciento para los cefalópodos.

Este ha sido el principal asunto de discrepancia a lo largo de todos los contactos y fue la causa de que se produjera una ruptura en la sexta ronda de negociaciones en Bruselas, después de que Marruecos rechazara de plano la propuesta europea.

Aún en el caso de lograrse un acercamiento respecto a las reducciones, subsisten otras importantes discrepancias en lo que respecta a las exigencias marroquíes de que los desembarcos de las capturas se hagan en puertos del país y en que los barcos europeos recluten a un 35 por ciento de marineros marroquíes. EFE