Bruselas, 8 nov (EFE).- Los ciudadanos deben conocer y hacer respetar sus derechos, por lo que la información y la formación serán las prioridadades fundamentales en la política de los consumidores para el período 1996-98, aprobada hoy, miércoles, por la Comisión Europea. En la actualidad, la política de los consumidores representa apenas un 0,00027 por ciento del presupuesto total de la Unión Europea, subrayó en rueda de prensa la comisaria europea de Consumo, Emma Bonino. "Menos legislación y más información y formación, para que el ciudadano europeo pueda defenderse por sí solo", subrayó Bonino, al tiempo que señaló su intención de organizar varios forums europeos centrados en la información a los consumidores. El próximo 20 y 21 de noviembre se celebrará un Forum en Madrid bajo el tema "Educación y Formación" de Consumidores, precisó. Asimismo, el 13 de noviembre se iniciará una campaña de información a los consumidores en once países comunitarios a través de emisoras de radio públicas y privadas a trav
és de anuncios. Las prioridades de acción comunitarias serán la intensificación de esfuerzos para mejorar la educación e información de los consumidores y completar y actualizar el marco necesario para asegurar que los intereses de los consumidores serán tomados plenamente en cuenta en el mercado interior. Bonino citó también como ejes prioritarios de un "Libro Verde"sobre el consumo "proteger los intereses de los consumidores en el suministro de servicios esenciales de utilidad pública". Asimismo, adoptar medidas para permitir a los consumidores aprovechar las ventajas de la sociedad de información y para aumentar la confianza de los consumidores en los productos alimenticios. La Comisión Europea se propone también ayudar a los países de Europa Central y Oriental así como a los países en vías de desarrollo a elaborar políticas en favor de los consumidores. Bonino dijo que el Ejecutivo comunitario quiere vigilar que los problemas inmediatos de base sean reconocidos y encuentren soluciones prácticas. "Los con
sumidores señalan dificultades en la adquisición de servicios financieros a causa de la falta de información y los servicios esenciales de utilidad pública le causan vastos problemas tanto en lo que concierne a la calidad como a la eficacia de los costes", subrayó. También consideró que los estudios acerca de los consumidores revelan problemas en materia de pureza y seguridad de productos alimenticios, problemas a los que hay que atacar. "La capacidad de los consumidores a protegerse debe ser mejorada y el mejor modo de lograrlo es el sistema educativo. Los Estados miembros son responsables en primer rango, pero la Comisión estima necesario señalar qué medidas particulares deben ser adoptadas para obtener el efecto deseado", dijo, La eurocomisaria explicó que en su opinión, las etiquetas de los productos destinados a los comsumidores deben tener un máximo de información sobre su contenido "y si luego el consumidor se lo quiere comer, que se lo coma". Hizo una distinción, sin embargo, en los productos que pue
dan ser perjudiciales para la salud, que deben ser prohibidos.