Bruselas, 23 sep (EFE).- La Comisión Europea y Senegal iniciarán el próximo jueves en Bruselas probablemente la última ronda negociadora para la firma de un nuevo acuerdo pesquero antes de que concluya, el martes de la semana próxima, el tratado en vigor. La comisaria europea de Pesca, Emma Bonino, se entrevistó hoy, lunes, con el ministro senegalés de Pesca, Alassane Ndiaye, para relanzar las negociaciones. Fuentes comunitarias señalaron después de la reunión que "no existen grandes problemas" para alcanzar un compromiso. La comisaria aprovechó una visita realizada a ese país por razones de ayuda humanitaria, el pasado mes de agosto, para allanar el terreno ante la ronda de discusiones que comenzarán esta semana. Las últimas negociaciones tuvieron lugar en Bruselas, el pasado mes de julio, sin que ambas partes lograran un acuerdo sobre las compensaciones financieras que recibirá Senegal por dejar que faenen en sus aguas los barcos de la Unión Europea (UE). El Gobierno senegalés pide una compensación anual d
e 33 millones de ecus (5.300 millones de pesetas), frente a los 10 millones (1.600 millones de pesetas) ofrecidos por la UE. Ese país pide también fuertes incrementos en los cánones que tendrán que pagar los armadores, mientras que la Comisión sólo está dispuesta a un aumento anual del 5 por ciento. En la pasada ronda negociadora, las autoridades comunitarias y senegalesas lograron aproximar sus posiciones en otros puntos del nuevo acuerdo, como la duración del nuevo tratado, las zonas de pesca y la dimensión de las redes. En cuanto a la vigencia del acuerdo, las posturas de partida son cinco años, por parte de la Comisión Europea, y dos años por parte de Senegal, aunque este país podría aceptar un aumento de hasta cuatro años. Unos 140 barcos comunitarios faenan actualmente en aguas de Senegal, de los que 110 son españoles, procedentes fundamentalmente de Andalucía. La Comisión pide un incremento del 20 por ciento de las posibilidades de pesca, lo que favorecería en gran parte a la flota pelágica de Alemani
a y Holanda, cuyos barcos no están todavía presentes en esas aguas, y a la de Francia. Los negociadores comunitarios reivindican la incorporación en el acuerdo de una veintena, aproximadamente, de barcos pelágicos (sardina y caballa) y un aumento de 6 a 16 del número de barcos palangreros.